Si se hubieran formado en los 80 en Sunset Strip, habrían estado compartiendo escenario, sudor, Jack Daniels y algún que otro tipo de sustancia y/o fluidos junto a Guns N’ Roses, Skid Row o Motley Crue. Pero se formaron sobre el 2009 en la terreta, lugar de nacimiento dels fartons, las paellas, el Trinaranjus y hasta la Coca-Cola según cuentan los mayores.. en la capital del Turia, en la cuna de las fallas… Bueno, voy a parar un poco que me vengo arriba. A lo que íbamos, se formaron en la costa Este de España, lugar un tanto complicado para dar a conocer el estilo que practican, así que les ha tocado picar mucho y tragar millas para que se les reconozca lo profesionales que son y tengan esa merecida visibilidad de la que ahora están disfrutando. Justo ahora que estoy escribiendo ésta reseña están tocando por California nada mas y nada menos, se que alguna vez han estado dando alguna vuelta por Europa, pero ver el cartel de tu banda en un local a 10.000 kilómetros de tu casa te tiene que dar un buen subidón.
Tenía muchas ganas de tener en mis manos su último lanzamiento, ya que por casa siempre han sonado mucho y siempre que he podido me he acercado a sus conciertos, es más, mi niña me dejaba la cocina tot per l’aire cuando fregaba los platos, ya que no podía dejar de moverse mientras oía a los Jolly Joker.
Es su cuarto trabajo en la corta carrera que llevan, pertenece al pasado año 2022 y le han bautizado Loud and Proud, editado por Dark Rails Records, el cual vino con un póster agradeciendo la espera a los fans, el típico desplegable que venía en la Superpop y que ahora decora parte de mi zulo de bricolaje. 10 temas cargados de potencia te esperan en éste álbum, donde vas a tener riff´s pegadizos que se te van a quedar a la primera, más energía que en un Redbull, muchos coros e incluso sorprendentemente, algún piano.
El CD viene el formato digipack con un diseño muy colorido que destaca mucho con respecto al anterior, mucho más acorde al sonido, actitud y desparpajo que desprende la banda. El cambio más notable que he notado en este disco con respecto a los anteriores para mi opinión es la voz de Lane, antes parecía que tenía solo dos registros y ahora es una ruleta que le puedes dar dos o tres vueltas. Musicalmente me resulta muy entretenido, los temas son muy variados y van directos al grano, no hay florituras ni rellenos, rock y nada mas, eso junto a la corta duración del disco hace que se te pase en un tres y no res, cuando te quieres dar cuenta ya estás dándole otra vuelta sin apenas enterarte.
Al igual que cualquier cocinero de hoy en día puede tener buenos ingredientes al alcance de su mano, todos los músicos que hay ahora mismo en la escena tienen a su alcance excelentes medios para hacer un gran disco, pero te hace falta algo especial para conseguir un pedazo de paella como éste Loud and Proud.
Angel Gabaldón