Han pasado ya dos años desde la publicación del primer disco de Elizabeltz, sus no tan numerosos conciertos han servido para que la infección se extienda como la peste entre nuestros foreros. Dos en Cantabria, aquella fiesta maldita del Carnaval de 2023 en la que todo se torció (nos fallaron dos grupos, se lesionó uno de sus guitarristas, un espontaneo rompió un cristal de la sala desde fuera… ) y sin embargo terminó siendo épica, y una nueva segunda visita al New con el estupor de quien aun no les conocía y la inconmensurable liada junto a Pizzería Moloch. Con muchos de vosotros intentando deglutir el complejo trago que traen como segundo disco, es hora de volver la vista atrás, rescatar el primero y gritar como predicador desde nuestro púlpito. ¡Yo ya os advertí, y no me hicisteis caso!
Las comparaciones estéticas, algo superficiales y desde la lejanía no han permitido a mucha gente apreciar la complejidad de una banda como Elizabeltz (Juego de palabras en euskera Eliza: Iglesia, Beltza: Negra). Tras los predominantes elementos Occult Rock hay muchas capas que rascar ya que sus enmascarados miembros traen esperiencias de lo más diversas, desde el ambiente Gótico, hasta el Death Metal, entre otras. Así Yersinia se enriquece con cientos de matices que sólo puedes apreciar si cierras los ojos y te dejas guiar por el oído.
La tarea es complicada, porque precisamente uno de los puntos fuertes de la banda es la presencia escénica y capacidad teatral de su vocalista Sergio Meaurio, quien además de una impresionante labor creando melodías siniestramente imposible es absolutamente impactante sobre las tablas, con uso de elementos como el fuego, el maquillaje, los zancos todo tipo de vestimentas y sobre todo poses imposiblemente desquiciadas.
En su día os hubiese dicho que todos los flecos de Elizabeltz estaban a punto de deshilacharse y que las nuevas canciones mostrarían sin duda nuevos enfoques que nos ayudarían a empezar a comprender la verdadera dimensión de la banda. Llego tarde, porque el segundo álbum ya está aquí, y tu misma, con un par de escuchas vas a llegar a esas mismas conclusiones.
Si aun no lo has hecho, ve a verles. Nada más que añadir.