Más de dos décadas desde el nacimiento de 4 de Copas como banda, son ya seis discos, si no me fallan las cuentas y un camino con cientos de conciertos a sus espaldas, en el que se han cruzado con los que un día fueron sólo sus ídolos como Los Suaves, La Fuga o Marea y hoy colaboran poniendo voces a algunos de sus temas más conocidos.
El nuevo disco A Fuego nace marcado por la pandemia. Tras incorporarse Nanci como nuevo cantante hace tres años, la maquinaria tuvo que detenerse y la grabación fue pospuesta hasta el final del confinamiento. De esos días oscuros nace el primer single “Prefiero Cantar” en el que mantienen una actitud en parte optimista ante el futuro. Como la parada obligatoria no había permitido hacer la debida presentación han volcado sus esfuerzos en mostrar su trabajo a través de videoclips; así “Prefiero Morder”, “Himno” o la citada “Prefiero Cantar” se han hecho ya un hueco entre los seguidores del grupo junto a otros ya clásicos como “Madre Cerveza”, “Camino”…
A la entrada del teatro nos reciben con bandejas de hojaldre. Se nota que están contentos de presentar finalmente en casa, pese a todas las dificultades. Miguel nos cuenta que tras tanto tiempo sin tocar se siente como si estuviese ante un nuevo comienzo. Además, a pesar de llevar tres años juntos, hoy es la puesta de largo de su nuevo cantante. En los altavoces suenan el “O Fortuna” y las pantallas gigantes muestran una cuenta atrás sobre un fondo de fuego. El propio Nanci reconoce en varias ocasiones que el ambiente les es extraño, “Tener que ver un concierto así, sentado, sin poder tomar una cerveza… yo no vendría” dice agradecido con la respuesta de un teatro ocupado hasta donde permite el protocolo. El set sirve como repaso a su discografía, casi sin darnos cuenta, resulta que nos las sabemos todas. Fito de la Fuga les acompaña como sorpresa en el escenario, guiñan a Marea, consiguen arrancar las voces de la gente en varios estribillos, explota el confeti y poco a poco consiguen que el público se olvide por un momento de lo que está pasando y simplemente disfrute de la música. En los bises rinden un sincero tributo a Torrelavega, ciudad que les vio nacer, en la que han crecido, y en la que tienen pensado morir.
Volvemos a casa contentos de ver que los conciertos de rock en el TMCE son cada vez más habituales. Recordamos con cariño el ciclo que tuvo lugar el año pasado y lanzamos nuestras esperanzas para que antes de que termine el año podamos volver a ver una programación como aquella sobre estas mismas tablas.