Es una pena que la reseña de este disco, que tantas ganas tenía de desgranar, me coincida ahora, en plena época de exámenes y con la mayor carga de trabajo del año… Septiembre nunca ha sido un buen mes para nada, ni para nadie…
De todas formas, espero estar a la altura del álbum y acercarme, lo más posible, a las sensaciones que me ha producido, sin caer en formulaciones del TIR, el VAN o las Quasirrentas, entremezcladas con las teorías de la Calidad de Kaoru Ishikawa, o los aplazamientos de la deuda pública en el ámbito tributario, sin olvidar las nuevas promociones de Trio Futura, Trio Conexión, Trio Plus, Duo ADSL…
Y digo que espero estar a la altura, porque Memento Mori, el tercer álbum de los asturianos Posession, es sin lugar a dudas uno de los mejores trabajos que han caído en mis manos últimamente, máxime si tenemos en cuenta que no hemos tenido que salir de nuestras fronteras para encontrarlo, y eso, practicando el estilo que practican, a día de hoy es algo que se me antoja, a priori, imposible.
Memento Mori es la continuación de su último trabajo, el aclamado Art Diabolis, editado ya en el 2004. La espera de cuatro años, quizás larga teniendo en cuenta que en el panorama underground los discos suelen salir al mercado en períodos más cortos de tiempo entre si, ha merecido sin lugar a dudas la pena.
Y es que Memento Mori es un paso más, un disco más potente, más directo al oído, quizás no tan metálico pero mucho más técnico, más progresivo, más intenso, con partes donde se bajan revoluciones, o incluso se pierde la distorsión, un álbum que sigue las pautas iniciadas por su predecesor, pero que da muestras de una madurez tanto en el sonido como en la composición poco usual en bandas del mismo estilo, o al menos agrupables bajo las ramas del metal, dentro del panorama nacional.
Cabe destacar el hecho de que las voces cada vez son menos agudas, en ese sentido hay que reconocer el trabajo de Titi para buscar nuevos registros, llegando incluso en alguna de las nuevas canciones a introducir pasajes guturales, algo que el oído agradece ya que en los anteriores trabajos podía incluso hacerse pesado por lo lineal de este apartado.
Otro de los grandes, grandísimo diría yo, pasos adelante que ha dado la banda es el cambio de batería. Y es que, sin desmerecer para nada a su predecesor, Iván Rubio es posiblemente uno de los mejores baterías en su género dentro del panorama underground nacional. Si en el disco ya queda de manifiesto la calidad y la riqueza del trabajo que se ha hecho en la percusión, no es nada comparado a lo que depara en directo. Es una auténtica “mala bestia” que cuando tuve la ocasión de verlos en Coruña unas semanas atrás, solamente me trajo a la cabeza a un batería: Brann Dailor, de Mastodon.
La única pega que le encuentro es la producción, que si conforme ha mejorado respecto a los anteriores, sobre todo si lo comparamos con el Anoxia, su primer álbum, de un estilo más crudo que se acercaba al de bandas como Dystopia o His Hero Is Gone, bajo mi punto de vista no llega a reflejar el verdadero sonido que la banda sí logra en directo, su grandísimo punto fuerte.
En conclusión, Memento Mori es, bajo mi punto de vista, el mejor de los tres trabajos que en sus diez años de existencia como banda han editado Posession. Un disco maduro, innovador en cuanto a la composición, donde se ha dado un paso más hace las nuevas tendencias que marca el metal, pero manteniendo su característico sonido, la temática de las letras, y la oscura ambientación que rodea tanto las canciones, como los vídeos, como las ediciones gráficas.
Memento Mori enganchará a sus fans de siempre, aquellos que ya los descubrieron con el Anoxia, y a quienes atrajo irremediablemente el Art Diabolis, pero abriéndose a un abanico de público mucho mayor, un espectro en el cual se encuentran los seguidores de bandas como Opeth, Mastodon o Neurosis, entre otros.
Un disco que consagra a Posession como una de las mejores bandas dentro del amplio espectro del metal nacional, y una referencia muy a tener en cuenta para el panorama europeo.
No perdáis la oportunidad de verlos en directo, porque cualquier grata sensación que os haya podido dejar el disco, se verá remarcada en cualquiera de sus conciertos, y si tenéis la ocasión os recomiendo que os hagáis con la edición LP de Memento Mori, un precioso vinilo blanco de 180 gramos, en una carpeta con un diseño espectacular.
Yo, por la parte que me toca, a seguir estudiando… Espero al menos haber cumplido con la reseña del gran trabajo de los asturianos Posession, y que con ello haya despertado la curiosidad de quienes no lo hayan escuchado para que le den una oportunidad. Saludos a todxs… Y buen Septiembre, que falta nos hace.
Comentario por Dr Tronner
Fotografía por POSESSION