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En la carrera por ocupar el trono de U2 como reyes del Arena-Rock, los candidatos más claros hoy en día podrían ser Coldplay, The Killers y Muse. Los dos primeros siempre han tenido vocación de superventas y llena estadios, sin embargo el caso de Muse es más sorprendente. En su caso es lo brutal y espectacular de su directo, desde Showbiz hace casi diez años, lo que les ha llevado hasta ese lugar, porque su música, con su mezcla de pop culto a lo Radiohead, metal, rock progresivo y la teatralidad heterogénea de Queen, no parece en teoría demasiado comercial.
Y así, en este puesto de privilegio, y 3 años después de su disco más celebrado y exitoso (Black Holes And Revelations), Bellamy y los suyos vuelven con The Resistance. En este trabajo hay pocas sorpresas, y se observa algo de continuismo con respecto al anterior; alternancia de electrónica y metal, épica, extravagancias neoclásicas y letras entre la crítica política y la ciencia ficción. Tan sólo se añade a la mezcla como algo nuevo el enfoque sinfónico de la suite en tres partes Exogenesis, aunque lo realmente novedoso sea más la forma que el contenido (la música clásica siempre ha estado presente en Muse, ya sean pinceladas como en Space Dementia o partes enteras como en Butterflies And Hurricanes).
Lo que sí destaca son los homenajes a Queen, que en anteriores obras sólo se sugerían. La gran canción del disco, United States of Eurasia, bebe de Bohemian Rapsody, We Are The Champions e incluso de Mustapha, y consigue lo que habían prometido en las entrevistas previas a la publicación del álbum, locura, grandiosidad, barroquismo, diversión. Desgraciadamente el resto del disco no está a la altura. Destaca el tecno-pop de Undisclosed Desires, el thrash metal “museado” de Unnatural Selection y el himno-rock de Resistance. También es curiosa I Belong To You, con su toque cabaretero y su solo de clarinete. Exogénesis se queda a medias, a pesar de tener partes muy interesantes, y el resto del disco resulta un poco anodino para lo que se supone que es Muse.
Aún así, The Resistance contiene buenos momentos, y sobre todo, oportunidades para seguir deslumbrando en directo, donde seguro que incluso las canciones más mediocres del disco alcanzan una nueva dimensión.
Comentario por Absento
Fotografía por MUSE
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