Desde que Megadeth volviesen a la carga en 2004, tras un supuesto parón (que les llevó menos tiempo que a muchos grupos componer cualquiera de sus discos), todo han sido alegrías. Puedes preferir uno u otro, pero todos los fans están de acuerdo en que Megadeth está viviendo una segunda juventud como banda y que estos tres últimos discos han rozado el nivel de sus clásicos.
Sin embargo y pese a ser un disco que otros de su quinta desearían haber firmado (y no miro a nadie), Th1rt3en ha hecho temblar el listón. Tal vez el salto sea válido, pero sin duda está muy apurado. Tal y como me puntualizó Lozoot de The MusicAll el otro dia charlando, probablemente los motivos se hallen en que con este cierran etapa y contrato con Roadrunner. Mustaine ha declarado que después de este se retirará por un tiempo, para centrarse en su estudio de grabación.
Parece que la relación con Roadrunner no ha sido del todo buena, de hecho Mustaine ha declarado que preferiría retirarse antes que seguir tocando de esa manera, y estima que en un futuro los discos de Megadeth puedan editarse de manera independiente. Th1rt3en hace referencia al número de disco en el que nos encontramos, y también trae detrás una supuesta leyenda negra de mala suerte y coincidencias, pero también es posible que Mustaine haya puesto los huevos encima de la mesa, como ese señor de “El Mundo Today” y haya decidido dar a Roadrunner una canción más de las que estaba obligado por contrato.
Así pues, y aunque Dave ha defendido el disco con uñas y dientes, incluso afirmando que no ha escuchado un disco con tantos buenos temas desde el Appetite de los Guns, está bastante claro que estamos ante un disco de transición. En el se juntan canciones compuestas últimamente, algunas de ellas para formar parte de la banda sonora de videojuegos junto a otras que ya fueron bonus track del Youthtanasia o el United Abominations.
En mi opinión no estamos ante un disco terrible, pero tampoco ante uno tan brillante como los de esta última etapa. Tiene algunos buenos temas, desde el single decididamente pop (a la manera de Megadeth, nunca habían compuesto nada tan directo desde A Tout le Monde), hasta temas algo más enrevesados como New World Order. Pero en general es más disperso y no aguanta la comparación con sus antecesores. Eso si, no creo que nos hallemos en absoluto frente a un pinchazo, si no más bien, ante la obligación de tener un disco listo para determinada fecha, y el hartazgo de Mustaine hacia los plazos. Seguro que muy pronto volverá a componer algo que no sólo “cumpla” sino que nos vuelva a dejar flipados.
Comentario por Oskar Sánchez
Fotografía por MEGADETH