Al buscar buscar información sobre Cynic en Wikipedia te encuentras con una descripción tan bizarra como “Metal progresivo con elementos de death metal, rock, jazz fusión y world music”. Sin duda una prueba más de que son una de esas bandas que se escapan a las fronteras impuestas y transitan líbremente por el mar de la música según les conviene. Algún día alguien encontrará una palabra, mentras tanto, a mi me gusta decir “Vanguardia” para clasificar a todos estos que tiran del carro hacia adelante en lugar de transitar exactamente por las rodadas que dejaron otros. Evidentemente hay trazos de todas esas cosas en la música de Cynic, nadie nace de la nada, somos enanos a espaldas de gigantes, pero obviedades aparte podemos decir que son una de esas bandas genuinas, haciendo música propia.
Cynic trabajan a un ritmo pausado pero continuo, dándose el tiempo necesario para la creación y por eso Kindly Bent To Free Us es sólo su segundo album desde la reunión en 2008, aunque en este tiempo han editado también dos EP´S. Su camino musical les ha ido alejando de las partes más influenciadas por el metal extremo y acercándoles hacia una música más melancólica, dentro de su espíritu progresivo. Es esta una evolución similar a la que muchas otras bandas de su generación han tenido, y al igual que en todos esos otros casos los fans están claramente divididos entre los que se niegan a aceptar el nuevo camino y los que recibimos con interés a las bandas que deciden seguir haciendo la música que les apetece en cada momento.
El mismo Paul Albert Vidal, incidía en la novedad que supone este nuevo album en su carrera en una entrevista para la revista irlandesa Molten: “It’s definitely new. It’s not like anything we’ve done before. It’s a new color, a new space”, y es que lo más grande de Cynic es que podrían haberse limitado a repetir una y otra vez la fórmula de “Focus” y sin embargo siguen activos en la eterna búsqueda, reinventándose y creando con total libertad.
Comentario por Oskar Sánchez
Fotografía por CYNIC