El esperado segundo trabajo de Cuming Soon ha estado a punto de suponer un largo punto y aparte en la historia del grupo. Un viaje sin fecha de retorno a las antípodas por parte de Lalo (Guitarra y voz) parecía imposibilitar la continuidad, sin embargo la banda hizo un gran esfuerzo contrareloj para que estas canciones no se quedasen en el cajón.
El disco se grabó en febrero de 2013 y por diversos motivos la edición se fue retrasando hasta mediados de 2014. Puede que la premura final tenga que ver en que el diseño de la portada sea una sencilla reutilización de la genial portada que Somonton hizo para su debut, pero ese es el único detalle en el que este segundo disco puede tener algo que envidiar a su antecesor.
Cuming han crecido, los temas son igual de buenos; cuesta quedarse con uno, es un bloque de poco más de media hora en el que no sobra absolutamente nada. Mantienen el aire sureño pero suenan aun más contundentes. Han prescindido de muchos de los arreglos que utilizaron en su anterior álbum para retratar de una forma cruda su sonido de directo. Eso si, han contado con la impresionante voz negra de Piloshka en los coros, que se complementa a la perfección con la de Lalo dotándola aun de más fuerza.
Hay que destacar la sabia mano de Jose Cuenca de La:Zelda, en la producción, padre de algunas de las guitarras más contundentes que escuchamos en los últimos años en los discos publicados por estos lares. El disco suena cristalino y poderoso y como el material es excelente todo brilla al nivel que brillan los discos de las bandas muy grandes.
Comentario por Oskar Sánchez
Fotografía por CUMING SOON