Los suecos At The Gates dejaron huella con su “Slaughter Of The Soul” de 1995, disco de obligada escucha para los degustadores del buen death sueco, pero justo un año después la banda decidió separarse, su vocalista Tomas Lindberg durante todos estos años no ha parado ni un segundo con incontables proyectos entre los que destacan The Great Deceiver, Lock Up, Nightrage o Disfear, mientras que el resto de sus excompañeros montaron The haunted, su primer lanzamiento musicalmente contenía bastante similitudes con At the Gates que con el tiempo y mas trabajos a sus espaldas han ido desapareciendo, dejando a la banda cada vez más en un segundo plano hasta 2014, en el que se hizo oficial que At the Gates volvían al estudio. El retorno de la mítica banda sueca se ha hecho esperar casi la friolera de dos décadas, desde luego expectativa sí que había, pero ¿Qué puede aportar At The Gates a estas alturas?
Todo comienza con una intro recitada en castellano por el líder de la mítica banda chilena Pentagram, dando paso a “Death and the Labyrinth” y coño, sí suena a At The Gates, no hay experimentos, son los que eran hace casi 20 años, puro death sueco con riffs aplastantes, y así uno tras otro todos los temas del disco que pasan como un cañonazo, y si obviamente, tiendes a comparar, no es un disco tan fácil de degustar como su predecesor, ni tan directo, aunque el tema anteriormente citado “Death And The Labyrinth”, “At War With Reality”, “The circular Ruins”, “The Book Of Sand” o “Eater Of Gods” por decir alguno, son el fiel exponente de que At The Gates están de vuelta, dando un golpe sobre la mesa y apartando los millares de clones rancios que intentan emular su sonido. Los únicos momentos de respiro son un interludio de apenas dos minutos titulado “City Of Mirrors” y el medio tiempo que cierra el cd “The Night Eternal”, un tema más Groove y oscuro que el resto pero no por ello malo, ni mucho menos.
No hay más que decir, la larga espera ha merecido la pena desde luego, incluso un servidor no se esperaba un trabajo tan At the Gates, pero si han vuelto y muy para bien, la pregunta ahora es ¿Por qué coño se fueron?
Comentario por Cold
Fotografía por AT THE GATES