PAY MY DUES: La visita del primer cantante de Maiden se convierte en uno de los eventos imprescindibles este año en Cantabria. Una noche nostálgica y memorable que no podíamos perdernos.
Ocho y media de la tarde, acabo de terminar de grabar el programa y estoy preparando la cena. No me apetece lo más mínimo salir de casa, estoy hecho un asco. Me apetece cenar y acostarme a dormir, pero en la Heaven toca Paul Di’Anno.
No se como lo veréis vosotros, pero par mi hay ocasiones en las que hay una sensación superior a la apetencia del cuerpo de acudir o no a un concierto. Algo así, tan cerca, hay que ir a verlo. Si piensas en la ingente influencia de los dos primeros discos de Maiden sobre tantísima música que ha venido después, hay una fuerza superior que te empuja a mover el culo y simplemente ir a pagar la deuda, y rendir con tu presencia un poco de pleitesía a los grandes.
Con una hora de retraso abrían el show Ever Dream, con intención de demostrar que en el Bierzo aparte de buenos pimientos también se da el Heavy Metal. Ever Dream es una banda de cinco miembros con vocalista femenina. Teniendo en cuenta además que su nombre proviene de uno de los temas del Century Child de Nightwish quedan destapadas parte de sus influencias, aunque no las únicas. Su música está cercana al metal sinfónico, con bastantes detalles, y la voz está en algún punto entre un registro rockero y heavy metalero más clásico. Es la primera vez que se embarcan en una gira de este calibre y se les veía con muchas ganas de dar a conocer los temas de su ópera prima The Darkest Time. Pese a que su concierto fue cortito supongo que pensaron que se haría más ameno incluyendo algunas versiones, y el repertorio escogido a ese respecto fue bastante sorprendente porque todas se alejaban un poco de su sonido, fueron un medley con el Kickstart my Heart de Mötley Crüe y Hey Joe de Hendix, y una del Black Album de Metallica que no recuerdo con exactitud, puede que fuese My Friend of Misery o Don’t Thread on Me… maldita memoria.
En general me gustaron mucho más sus propios temas que las versiones. Por poner una pega diría que a la voz le falta aun un poco de experiencia, cuando disparaban los coros pregrabados se percibía que podía llegar bastante más allá de lo que lo está haciendo, pero al fin y al cabo se trata de su primera gira potente y tienen tiempo para pillar más tablas. Recomiendo una escucha a su disco para apreciar el verdadero potencial de Celeste a las voces.
Tras un buen rato de espera, Paul Di’Anno y los suyos llegaron hasta el escenario. La escena no era muy esperanzadora, la verdad. Con Nino Rota de fondo veíamos llegar a un sudoroso y renqueante Paul, ayudado a caminar hacia el escenario. No dejó muy claro como, pero al parecer se había chafado un pie recientemente. Por fortuna, sólo fue el pie, y aunque también explicó que el concierto de la noche anterior en La Coruña y su posterior noche les había dejado tocados a todos y que estaba a punto de perder la voz, el concierto desde mi punto de vista fue digno.
Además de la esperada ristra de temas de los dos primeros álbumes de Maiden, también rescató algunos temas de su carrera en solitario o junto a Battlezone. La banda fue supercompetente y a veces si cerrabas los ojos te parecía estar viviendo tu particular “Rainbow 1981”. Está claro que Paul Di’Anno ha perdido fuerza, pero sigue cantando muy bien y consiguió dibujar en la cara de casi todo el mundo una gran sonrisa nostálgica.
Para terminar, y dejando muy claros sus orígenes punk Paul se permitió varias bromas hacia Whitesnake a las que añadió como punto final una acelerada versión del Blitzkrieg Bop de los Ramones.
Lo bueno de vivir en un sitio pequeño es que eventos como estos se convierten en un gran acontecimiento y por allí estaba toda la gente que debía estar. Hubo un momento hace unos años en que temí por el futuro de la Heaven, pero creo que han encontrado muy bien su sitio y si siguen por este camino apostando un poco fuerte por eventos de este tipo creo que se puede convertir en una referencia y lugar de parada de bandas cada vez más importantes en el norte.
Sorprendentemente, llegué a casa bastante menos cansado de lo que estaba al salir. La puta magia del rock and roll.
Crónica por Oskar Sánchez, fotos por Oskar Sánchez.