ATALAYA ROCK 2018

Dentro de este mes de octubre cargado de buenos eventos, volveríamos a centrar nuestra atención en tierras de Castilla y León, tras haber disfrutado del Zurbarán Rock en Burgos y El Bodega Rock en Hornillos de Eresma (Valladolid);  en esta ocasión no saldríamos de la provincia de Valladolid para asistir al ATALAYA ROCK en la población de Pozal de Gallinas, como el resto de los anteriores de carácter gratuito, todo un ejemplo de ganas, de ilusión por acercar el buen rock y el metal a todo el mundo.

El Atalaya Rock se forma allá por el 2005, cuando un grupo de amigos del pueblo, con apenas 530 habitantes, aficionados a los buenos conciertos de rock y metal, obligados hasta la fecha a tener que salir fuera para poder ver algo, se plantean ¿Por qué no montamos nosotros uno? Y sin experiencia ninguna, deciden arriesgarse. El lugar elegido es el polideportivo municipal. Para aquel primer evento, contarían con: Saratoga, Dünedain y Kain; teniendo bastante éxito, llegando en la actualidad a su XIV edición congregando a miles de personas. Como otros eventos similares de carácter gratuito, constituidos como Asociación Cultural  la financiación se consigue con el patrocinio de pequeñas empresas de la zona, venta de merchandising (camisetas, púas, chapas,…) y el día del festival con la barra. El día del evento es una fecha marcada ya a fuego en el calendario, implicando a todos los vecinos, colaborando en la propia barra o con la elaboración de bocadillos, etc. Para la edición de este año compondrían un cartel de lujo con el thrash y el heavy como base, con las bandas: DAWNLIGHT, STRIKEBACK, DÜNEDAIN, ÁNGELUS APATRIDA y SARATOGA.

Sobre las 20:36 Hrs., los primeros en aparecer en el escenario del  Atalaya Rock sería la banda local DAWNLIGHT desde Valladolid con el power metal como bandera.  Formados por Javi Morales (voz) y Nestor Valencia (guitarra) a los que se unen actualmente Andrés (bajo y coros), Miguel (batería) y Joni (Performance), si habéis leído bien performance, hoy en día en que hay multitud de bandas de power, intentar ser diferentes, buscar más allá es muy importante y Dawnlight lo consiguen a través de momentos de teatralización muy efectivos que representa Joni en varios momentos de la actuación vestido de monje, de payaso, de guerrero… Con uno especialmente divertido cuando bajo del escenario para dar de beber a los infieles allí presentes.  En cuanto a la parte vocal, algo básico en este palo musical, Javi cumple perfectamente las expectativas con buenas cualidades, consiguiendo un tono melódico muy bueno, sin abusar de agudos. Nos presentaban su EP del 2017 “Eternity”, publicado gracias a una campaña de crowd founding  en Verkami. El concierto constaría de unas siete canciones, destacando “Old path” de la que existe un video lyric, que tiene un inicio muy épico que pone mucho las pilas. Uno de los mejores momentos de la noche fue la tremenda versión que se marcaron del “Mirror, Mirror” de Blind Guardian, para lo cual se acompañaron en el escenario del guitarra de Ángelus Apátrida  Davish, siendo muy coreado por  los allí presentes.  Concluyendo con el tema que da nombre al EP “Eternity”, sin duda el mejor de su repertorio, con toques épicos y también momentos de velocidad, la  voz de Javi aquí suena brutal, acompañado de Joni vestido de monje con un libro negro y un humo rojo, para ofrecernos  el secreto de la eternidad. También hay un video lyric del tema. Grata sorpresa la de éstos vallisoletanos, con el aporte escénico de Joni, le da un punto muy entretenido, recordándome en cierta medida a lo que vivimos con Predicador en la Sala Cantabria. La banda tiene intención de grabar nuevo material a principios del 2019. Les seguiremos la pista.

Tras un rápido cambio de bártulos en el escenario de apenas 10 minutos, sobre las 21:30 hrs., llegaría el turno de STRIKEBACK desde Galicia, con el thrash de la vieja escuela como clara influencia. Formados en 2012 en A Coruña, compuestos actualmente por: Adrián Beltrán “Liber” (voz), Rafa García (guitarra), Sebas Musy (batería), Florian Musy (guitarra) y Alex Mella (bajo). Tienen publicados un EP homónimo  y dos discos “Share your Hate” del 2014 y su más reciente trabajo “The plague” publicado en Enero de 2018. Entre sus grandes logros está haber participado en numerosos festivales destacando El Resu, ganando en 2016 el Resurrection Band Contest y llegar a las semifinales del WOA Metal Battle Spain de ese mismo año. Comenzarían la actuación con “Wall of Silence” de su último trabajo, guitarras rápidas y contundencia vocal, que comenzaba a agitar las cabezas de los allí presentes, nos describe la sociedad actual que en muchas ocasiones tiene que callar y no puede alzar la voz por  miedo, siendo moldeados desde pequeños para no salirse de ese prototipo, como inculcan algunas religiones.  Tras saludarnos proseguirían con unos diez temas centrados principalmente en su más reciente trabajo, destacando “New Order” en la que se forman los primeros pogos, circle pits, etc; el tema hace hincapié  en que la humanidad es la que acabara con todo, con supuestos avances tecnológicos al  final son caminos a la deshumanización y al caos. Otro temazo sería  “B.H.S. (Boundless Human Stupidity)” primer single del último disco, en el que piden  la colaboración del público, con una fuerza brutal, tanto de la voz como de las guitarras, en el que parece que nos habla de adicciones y del circulo vicioso que supone;  otro de los grandes temas del concierto fue “Kill or be Killed” perteneciente al primer CD, que tiene un aire a Pantera, con una velocidad endiablada, precedida de un wall of death que removió los cimientos del lugar; el tema nos da de lleno en la conciencia con el tema de los niños soldados,  por desgracia de bastante actualidad en las guerras.  El tema homónimo de su último trabajo “The plage”,  fue de lo mejor del concierto, con todos los elementos del  sonido clásico, pero con  matices propios, incluyendo buenos desarrollos; la temática vuelve a girar en torno al cáncer que es el ser humano para la tierra, con las guerras físicas o tal vez metafóricas donde sólo importa el poder del dinero, que indirectamente, puede provocar nuestro final, como por ejemplo la venta de armas. Resumiendo, dentro de este thrash  old school al que recientemente se están apuntando muchas bandas y del que para destacar hay que incluir otras cosas,  Strikeback lo consiguen.Fue la manera perfecta de caldear  la pista del polideportivo de Pozal  ya entonces bastante numeroso de público.

Tras un  nuevo cambio en el escenario también muy ágil de apenas 20 minutos, sobre las 22:47 hrs. llegaría sobre el  escenario el grupo, para muchos, más esperado de la noche DÜNEDAIN, como así demostraría la cantidad de público que congregó, la mayor de la jornada. Dünedain surge como proyecto personal de Tony  Delgado sobre 1996, asentados en Madrigal de las Altas Torres (Ávila), con el power metal como sello dónde los temas épicos predominan en sus letras, algo que ya nos da la pista el nombre de la banda, relacionado con el universo de J.R.R. Tolkien.  No será hasta 2002 cuando comiencen  a rodar como tal, grabando su primera maqueta y dando sus primeros conciertos.  En 2007 publican su primer disco completo “La luz de mi oscuridad” con la producción del mítico Karlos Creator, con el que coincidirían en varios discos posteriores.

Tony que empezaría como voz principal ha alternado ese rol con el de 2ª voz en diferentes épocas de la banda, en las que tendrían como voz principal a Jacin, Jesus Izko (Nudo)  y actualmente Carlos Sanz “Nano” desde 2015. Entre sus hitos está el año 2010,  tras conocer a Zenobia en el Soul Of Metal 2010 se embarcan en una gira conjunta tras grabar juntas el single “Unidos por el metal”. En 2013 son finalistas de los Premios Música Independiente en la categoría de “Mejor Álbum de metal” por “Magia”. Tienen publicados 4 discos. En 2016 publican su último trabajo hasta la fecha “Pandemónium”, apareciendo también en 2018 en el disco homenaje a Mägo de Oz “Stay Oz” con el tema “Melodian”. La formación actual es: Tony (compositor, guitarra solista y 2ª voz); Carlos Sanz “Nano” (voz principal); Miguel Arias (Batería) y  Alberto “Rebus” (bajo). Como comentaba en la introducción al polideportivo ya estaba a reventar cuando Dünedain comenzaba su concierto, con el tema introductorio “Eón” jugando con las luces hasta explotar con uno de los temazos del último disco “Legado”, con la aparición estelar de Nano a la voz, con una batalla épica en el trasfondo todos al unísono coreaban su estribillo “(…) volverse a levantar; hay tanto que decir; no hay nada que callar; cuando se lazan las armas es momento de luchar (…)”.  No habría tiempo para relajarnos ya que al momento llegó “Bola de Cristal”, que también está lleno de épica de energía con guitarrazos tremendos. Agradeciéndonos la asistencia, nos recuerdan que están presentando su último trabajo “Pandemónium”, coreando en emotivo ¡¡Viva el metal!!  Proseguirían así con uno de mis temas preferidos del disco “Vuela”, con el desamor como trasfondo, con una gran emotividad que te pone las pilas de manera única,  botando toda la sala al unísono acompañando su estribillo: “(…) hoy quiero verte volar, sin dolor rabia ni miedo (…)”. Reanudarían repasando el “Pandemónium”, con otro gran tema “Confía en el amanecer”, con esa intro mítica con lo que parece un xilófono, que hace que ya para siempre,  entre en ese privilegiado grupo de canciones que con un par de notas y sin voz, ya las reconoces. El tema también juega con el desamor con un profundo estribillo: “(…) Donde estarán los recuerdos que olvidé; confiaré en el amanecer; donde estarán esos sueños que inventé; quiero ser libre (…)”.  A continuación llegó uno de los momentos más emotivos cuando Tony  tomo la voz principal para interpretar  “Hechizo”, un medio tiempo en su inicio que después coge la fuerza necesaria para llegar a hechizarnos a todos.  Agradeciéndonos la presencia, Nano protagoniza otro momento nostálgico, cuando recuerda los orígenes del festival, y como por aquel entonces con Saratoga en el escenario, él soñaba con poder algún día ocupar ese escenario, con los años se ha hecho realidad, en ese mismo escenario y de tú a tú con bandas como los propios Saratoga. Otro momento épico vino con la interpretación del tema “Tu sueño”, durante el cual, Nano se colocó una cámara en la cabeza para captar en primera persona toda la fuerza de la gente que abarrotaba el Atalaya Rock. Del mismo tema se publicó recientemente un video oficial grabado durante el Madrigal Fest 2018. Ya en la recta final hubo tiempo para recordar los otros discos como “Por los siglos de los siglos” de su primer trabajo “La luz de mi oscuridad” de 2007 para terminar con “Corazón de invierno” del “Mágica” de 2012, con Tony a la voz que tiene un toque épico muy bueno que te pone las pilas al momento, a luchar y  no rendirte.

Terminaría así un conciertazo que tardaremos mucho tiempo en olvidar, sin dudar lo mejor del festival. Dünedain han pasado a ser hoy en día lo mejor del power metal patrio, adelantando por la derecha a otras bandas como Zenobia, que tal vez tengan hoy en día más nombre. Sus discos están llenos de grandes temas, muchos de ellos ya himnos de nuestra bso personal, sobretodo este último “Pandemónium”, donde es muy difícil deshacerse de alguno de ellos, empiezas a escuchar un tema y te metes en bucle una y otra vez, la voz de Nano y la de Tony te acompañan allá donde vayas. Pero la fiesta no terminaba a aquí, aun nos quedaban dos pesos pesados del metal nacional, que lo tendrían muy difícil tras la avalancha de Dünedain.

Los siguientes en ocupar el escenario del Atalaya Rock, tras nuevamente, un cambio ágil,  serían ANGELUS APATRIDA desde Albacete. Originados en el 2000 cuando dos bandas de jóvenes que compartían local de ensayo deciden fusionarse combinando en lo posible sus  gustos musicales, para en 2001 grabar su primera maqueta “Lost in the Realms Orchinodaemon”, con un estilo cercano al power. Pero en ese momento hay una crisis por la marcha del cantante y el batería, los miembros restantes se replantean el estilo endureciéndolo hacia el thrash. . En 2003 ganan un concurso organizado por la revista Rock Total y el sello Red Dragon Records, que tenía como premio  participar en un disco tributo a Panzer. La canción escogida fue “Danza de la muerte”, contando con la colaboración del propio Carlos Pina en aquella época ya en R3. Posteriormente han participado en los principales festivales del país. El primer disco titulado “Evil Unleashed” se publica en 2006 de manera auto-editada, llegando a vender miles de copias. Muchos los han bautizado como la New Wave Of Spanish Thrash Metal, haciendo resurgir el estilo de la mano de bandas como Crisix. En 2009 firman con el sello internacional Century Media, girando con Arch Enemy para en 2010 publicar el que sería su tercer disco “Clockwork”, consiguiendo ser mejor banda de metal para Mondosonoro, mejor banda del año en Rockzone y Kerrang!, colándose también en diferentes listas de éxitos en España y Portugal. A partir de aquí y durante todos estos años la trayectoria ha sido imparable. Con  la publicación de 6 discos, el más reciente “Cabaret de la guillotine” de 2018. La banda la componen: Jose J Izquierdo (bajo y coros); Victor Valera (batería y coros); David G Alvarez “Davish” (guitarra) y Guillermo Izquierdo “Polako” (voz y guitarra).

Sobre las 0:15 hrs. comenzaría su descarga con una intro de sonidos pregrabados antesala del tema “One of us” del último disco, con guitarras rápidas  directas, con un trasfondo en la letra que busca no claudicar a la masa, tener ideas propias. Saltarían al disco anterior “Hidden Evolution” para sacudirnos con “Inmortal”, uno de mis temas preferidos de la banda, combina a la perfección la caña y la voz con el solo brutal de Davish. La letra sigue con el fondo reivindicativo y de denuncia, analizando las democracias actuales, como la española, donde muchos echan de menos dictadores, donde la libertad de expresión está comprometida con cierta ley mordaza, etc.  Así continuarían con un repertorio de unas 15 canciones, recorriendo sus diferentes discos, destacando “Sharpen the guillotine” del último trabajo que sigue ahondando en las dictaduras encubiertas de hoy en día, que es una combinación perfecta de fuerza en las guitarras y la voz, con momentos más melódicos que me gustan bastante. “Versus the world” tema de sus inicios también tiene una fuerza especial, junto  al temazo con el que terminaron el concierto “You Are Next” del disco The Call del 2012, que es todo un resumen de la brutalidad que llega a tu cabeza tras un concierto de estos bestias, que hizo las delicias de los allí asistentes con los pertinentes circle pit y pogos,  que mantuvo activo al público durante todo el concierto.

Terminarían así su actuación, una de nuestras mejores bandas con proyección internacional, dando fe que lo tienen bien merecido, tal vez Crisix les sigan muy de cerca. Ángelus Apátrida han conseguido aglutinar el old school clásico de la Bay Area  sabiendo añadir una modernización del sonido con elementos más actuales, que es precisamente lo que hicieron los big four para triunfar, salirse del estilo primigenio y crear algo superior, sobre todo con la variación de las voces, reforzado por guitarrazos llenos de fuerza y virtuosismo en cada uno de los riffs.

Tras el nuevo cambio en el escenario llegaríamos al final con la última banda en actuar, SARATOGA, hablar de Saratoga es hacerlo de una de las grandes bandas del metal de este país. Originados allá por el año 1992 por Niko del Hierro y Jero Ramiro, que decidían dejar sus propias bandas Barón Rojo y Ñu respectivamente, para embarcarse en algo nuevo, intentando unir lo mejor de sus distintas influencias. Para aquella primigenia formación contarían con Fortu (ex Obús) en la voz y Joaquín Arellana “El Niño” (ex Muro) en la batería, publicando en 1995 su primer disco homónimo “Saratoga” con Avispa. Dicho disco, junto el siguiente “Tributo”, supuso toda una revolución en el rock y el metal  patrio, como una luz al final de túnel espectacular.

A partir de aquí la leyenda de Saratoga comienza a escribirse con diferentes cambios de formación, las más importantes en la voz, pasando por la banda tras Fortu,  Gabriel Boete, Leo Jiménez y Tete Novoa. Con los años cambiaran el estilo adentrándose más en el power metal / heavy clásico  Entre sus hitos estaría por ejemplo,  irrumpir en la lista AFYVE en el año 2004 con el disco “El Clan de la lucha” en el puesto nº 10. Tienen publicados 12 discos, más varios directos, DVDs, etc. La Formación actual la componen: Niko del Hierro (bajo); Jero Ramiro (guitarra); Tete Novoa (voz) y Dani Pérez (batería). Inmersos en el final de la gira “25 años de Historia, 15 años de una Leyenda”, en el que nos están acercando los temas tal vez, su álbum más importante el “Agotarás”. Sobre las 2:00 hrs. empezarían su concierto con el tema “Con mano izquierda”, todo un cañonazo que hizo retumbar los cimientos del polideportivo. Proseguirían con varios de los clásicos del citado Agotarás: “Tras las Rejas”,  “a morir” para llegar a una de las mejores del disco y todo un himno de la banda “las puertas del cielo” en la que la voz de Tete suena brutal, muy coreada por los allí presentes.  Tras agradecer la presencia, sonaría “Oscura la luz” otro tema al que tengo un cariño especial, con un estilo muy  ochentero que me recuerda mucho a mis queridos Emboque,  además de  un  gran estribillo: “(…) Debes saber que el tiempo no espera. Debes pensar que todo no llega. Oscura la luz que a ti te ciega. Oscuro el poder que quieres lograr (…)”. La interacción con el público por parte de los músicos fue muy activa, algo que siempre valoro mucho en los conciertos, tienes que intentar arrastrar al público con tu actitud en el escenario, así Tete salió en alguna ocasión al borde del escenario haciendo las delicias de unas cuantas fans con ese cuerpazo que tiene el tío.  Hubo también espacio para otros temas clásicos de su extenso repertorio como “Vientos de guerra”, “Maldito corazón”, “Grita”, etc

Otro de esos momentos emotivos fue recordar su presencia en la primera edición del festival, que cumplía su XIV edición; junto al más intenso, cuando  Jero interpretó  la gran balada “Si amanece” con una guitarra acústica sujetada por un pie, para alternar con la suya eléctrica, todo un ejercicio de virtuosismo, con la gran voz de Tete, inundaron la sala del auténtico espíritu del buen metal, muy grandes.  Llegaría así la recta final del concierto con el tema “Como el viento”, todo un colofón a un gran concierto. Saratoga ha ocupado por derecho propio el siguiente escalón dentro del meta nacional de bandas como Barón Rojo, Obús, Muro, etc; sabiendo añadir su estilo propio con el power y el heavy clásico entre sus ingredientes. Con multitud de conciertos aquí y fuera de nuestras fronteras. Supieron  sobreponerse a la pérdida de  Leo Jiménez “La Bestia”, sin lugar a dudas nuestra mejor voz dentro del metal, y para mí la mejor época de la banda, encontrando a un gran Tete Novoa, que sin duda con los años ha conseguido impregnar a la banda y las canciones su propia personalidad. La actividad de Saratoga, no está anclada en el pasado precisamente, ya que el próximo 16 de Noviembre  sacarán a la venta su nuevo disco “Aeternus”, del cual acaban de estrenar  un videoclip de adelanto “El Olvidado de Dios”, el cual, ha superado las 100.000 visitas en pocos días. Grandes Saratoga.

Terminábamos así nuestro periplo en el Atalaya Rock con más de 7 horas de música a las espaldas, dando la enhorabuena a la organización la Asociación Amigos de la Atalaya y al pueblo de Pozal de Gallinas, sois todo un ejemplo que demuestra que si se quiere, se puede, en este caso montar un festival con un cartelazo con bandas nacionales de primer nivel y llenar el aforo, en esta edición al parecer, se han superado todas las expectativas. Cumpliendo escrupulosamente los horarios algo que hubiera hecho las delicias de nuestro compañero Txuxty. Tengo que aplaudir las buenas iniciativas que toda esa zona se programan durante el año: Zurbaran Rock, Bodega Rock, etc. Todas ellas sacadas a flote por la ilusión de sus pueblos y sus gentes. Por aquí tenemos algunos buenos ejemplos en la senda correcta como son el Vidiago Rock o el Rebujas. Ese es el camino, la manera de llevar el metal a cada rincón, no sólo centrarlo en las grandes urbes y sobretodo dejando que los más pequeños acudan a estos eventos,  es la única manera de que esto perdure.

¡¡¡ Enhorabuena Atalaya Rock y a por el próximo !!!.

Fotos y crónica de John Man.