Otros mil wookis más: Lo que empezó como un modesto festival de música extrema, parece estar llamado a convertirse en una de las citas metálicas más importantes de la cornisa norte.
El otro dia charlabamos con Rafa, el instigador de toda esta historia y recordabamos la primera edición del Milwookis. El crecimiento exponencial del festival ha sido realmente increible, y si sigue así, y la gente le muestra su apoyo seguramente no tardará en convertirse en un referente a nivel nacional de la escena metalica. Festivales como el Lorca Rock, el Artafe o el Viña empezaron de manera modesta y poco a poco fueron creciendo, el Wookis ha demostrado en estas cuatro ediciones capacidad de trabajo profesional a la altura de cualquier festival nacional o internacional, para crecer más, lo único que falta es que el presupuesto vaya aumentando.
Sin hacer cábalas sobre el futuro y centrandonos en la presente edición podemos decir que el resultado ha sido espectacular. No se puede achacar ni un solo mal detalle a la organización, (A excepción de no disponer de bebidas espirituosas en la barra).
A las ocho y cuarto de la tarde, unos quince minutos despues de que comenzasemos nuestra extensa colección de merchandising de Jagermeister, comenzaban a sonar Burning Cuchillo. El maestro de ceremonias del festival Oscar Sancho (Lujuria) reseñaba con acierto la buena idea de la organización del Wookis de incluir a dos bandas locales en el cartel.Muchas veces da la impresión de que hay que cumplir con la parte local pero que lo realmente importante es lo que viene de fuera, y sin embargo, tanto Burning Cuchillo, como Frontline de quien luego hablaremos estuvieron a la altura de las bandas visitantes sin ningún lugar a dudas.
Burning Cuchillo centraron su repertorio en su primer trabajo que editaron a principios de año. Tenía bastantes ganas de verles porque aun no había tenido oportunidad, y lo cierto es que tampoco se han prodigado mucho por los escenarios cántabros. A pesar de la responsabilidad de abrir el festi y de algún problemilla técnico en la primera parte el concierto nos dejó ganas de más. Nos llevamos por cierto la grata sorpresa de ver que el ex-bajista de Las Orejas del Lobo ahora en las filas de Burning Cuchillo. Cova (Cantante) protagonizó la anécdota de la noche, dejando encajada en el techo del pabellón en un equilibrio imposible una de las camisetas que estaban lanzando al público (imposible de hacer adrede)
Karras se ganaron el respeto de todo el público, demostrando que son mucho más que un grupo de chicas guapas y dando una cera absolutamente demencial. A pesar del concepto previo que algunos pudiesen tener su concierto dejó a todo el mundo muy convencido y despertó real interés por su música. Supongo que poco a poco nos iremos acostumbrando todos a ver chicas sobre las tablas, así debe de ser.
Si hubiese que escoger un concierto de todos los que vimos, yo creo que optaría por el de Frontline, en conjunto, musicalmente y en actitud estuvieron a un muy alto nivel. Y es cierto que no es el mejor concierto suyo que hemos visto, como alguien me comentaba durante la actuación, pero sin embargo tras tantos meses sin verles en directo, y prácticamente de parón para ellos, parecía más bien que venían reforzados de alguna larga gira. No se les vio nada dubitativos y la impresión general fue que al igual que Karras o Forever it Shall Be nos estaban visitando como banda foranea, Frontline podrían hacer el mismo papel en cualquier festival Europeo sin sonrojarse lo más mínimo. En las próximas semanas editan nuevos temas en forma de EP y con un sonidazo que mejora mucho el recogido en su primer cd. Estad atentos.
De vuelta a Alemania nos encontramos con Forever it Shall Be, que alguien ya ha definido por ahí como muy “del estilo”. Lo malo que tiene esto del Metalcore es que como todas las corrientes que se ponen de moda consiguen que mucha gente suene parecido, y eso es de lo que adoleció el concierto de Forever it Shall Be. Desde luego con un gran sonido y una buena puesta en escena, pero muy ubicado en los cánones de esta corriente. De cualquier manera disfrutamos de la matanza de palomas y sobre todo del momentazo en el que nos sorprendieron con una versión del Trooper de Iron Maiden. Nos congratula ver que últimamente muchas bandas de Metalcore están reivindicando a los clásicos como parte de nuestra cultura y nuestras raices.
Con Metalium hubo división de opiniones, principalmente entre los que son fans del heavy metal y los que no. A estos últimos el concierto les resultó lineal y demasiado agudo, claro, mientras que los más fans del metal clásico estaban emocionados con la actuación. Intentando ser objetivos se podría decir que a nivel técnico y musical la banda estuvo muy grande, para mi el especial lucimiento le tuvo el cantante que estuvo impecable durante toda la actuación. Personalmente no he sido nunca muy seguidor de Metalium y por tanto no me impliqué demasiado en su concierto, pero creo que es justo reconocer que lo hicieron muy bien. Por cierto, otro homenaje a los clásicos recuperando una versión habitual en su repertorio, Smoke on the Water.
Finalmente Illdisposed salieron a hacer lo suyo y creo que musicalmente estuvieron impresionantes. Tampoco soy muy seguidor de la banda, pero me tuvieron enganchado durante toda su actuación a pesar de el cansancio y el infructuoso intento de emborracharme a base de chupitos de Jagermeister, osea que aguantamos las siete horas casi “sin ayuda externa” y ya estabamos bastante doblados cuando Ildisposed sacaron su maquinaria. Francamente me dio la impresión de que ellos también estaban bastante cansados, pero como no puedo comparar con otras actuaciones suyas porque es la primera vez que les veo, no se si esa será la pose habitual de la banda en el escenario. Especialmente el cantante estaba bastante estático, y contrastaba mucho con la potencia músical que estaban desarrollando. Su concierto me ha abierto bastante el apetito de investigar su discografía un poco más a fondo.
A grandes rasgos y desde nuestro particular prisma así fue la jornada del 4milwookis, un festival al que como decimos al principio de esta pequeña crónica le deseamos la mejor de las suertes. No hemos comentado nada de las cifras de asistencia a espera de datos oficiales, pero la sensación fue de que en cuanto a asistencia se había quedado un poco flojo, una pena porque aunque el cartel era arriesgado los que estuvimos allí podemos asegurar que hubo mucha calidad en todos los conciertos. Esperamos que esto no mine la ilusión de la organización y que el cincomilwookis siga siendo una cita importante.
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Crónica por Oskar Sánchez, fotos por Oskar Sánchez.
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