¿En que notas dices que iba esto? El Arena vivió anoche un momento histórico, el inicio de una serie de Jam Sessions que prometen dar que hablar y ser una buena fuente de anécdotas para los músicos y aficionados que visiten dicho pub.
La idea parte, como todas las mejores de una calentada a lo largo de una noche de copas. En este caso Mario de Cuatro de Copas y Runintumaijed es quien tiene la idea y se la comenta a Javi del Pub Arena. La idea de hacer jams por supuesto no es nueva, pero se trata en esta ocasión de hacer una jam real, osea, no preparar mucho las cosas de antemano, tocar con gente que no conoces y sobre todo dejar el escenario y los instrumentos libres para cualquiera que quisiese subirse a tocar algo.
Partiendo de estas premisas, cualquier cosa podía suceder. Para empezar, hubo problemas para conseguir una batería, porque cada baterista es de una madre y un padre y bien es sabido que a casi ninguno le gusta compartir su instrumento. Finalmente se optó por hacer una jam acustica por exigencias del guión. Pero cuando todo estaba preparado milagrosamente apareció por allí un chico al que le gustó la idea de poder tocar en una jam, y al ver que no se había conseguido el instrumento, se trajo el suyo de casa. Me dijo los grupos en los que tocaba, uno de fusión y un par de ellos de hardcore, pero no consigo recordarlos.
Una vez todos los instrumentos estaban arriba a eso de las diez y media comenzó el espectáculo, la primera versión con un combinado de gente de Cuatro de Copas, ex Soylent Green, el chico este en cuestión de la batería y Toñin Wild a las voces tocando el Maldito Sea tu Nombre de Angeles del Infierno, sólamente los guitarristas habían tocado la versión alguna vez anteriormente, con lo que evidentemente fue un poco desastre y todo un acierto, porque al ver lo informal del asunto todo el mundo reaccionó muy rápido y no tuvo ninguna verguenza en subirse a improvisar versiones. Como bien dijo Dani Frills, a partir de aquí esto sólo puede ir hacia arriba.
Y lo cierto es que así fue. Al ser cuatro de agosto mucha de la gente a la que se había avisado no pudo asistir, y sin embargo se creó un ambiente muy majo en el que todo el mundo fue subiéndose a tocar lo que le apetecía. Sobre todo molaban los momentos en los que veías a la peña abajo preguntando:
– Oye, te sabes el Rock & Roll de Led Zeppelin?
– Si, pero no se tocar el bajo
– Bueno… pues toco yo el bajo y que nos siga este con la batería.
Así fueron cayendo el Here I Go Again de Whitesnake con medio Marcellus Wallace y Mario 4 de Copas entre otros, una improvisación funk con Iñaki de Deltonos, Juanma (ex sangre fria), y chachi de Extravagancia y Deliverance, el Rearview Mirror de Pearl Jam con Juan de No a la voz, el Final Countdown (elegida canción del verano por los asistentes y los vendedores de cupones), el Little Wing de Hendrix con Berto de King Size Co. a la voz, Hijos de Cain, parte del repertorio de cantautor de Dani Frills, Simpathy from the Devil, alguna de Muse cuyo nombre no recuerdo, el Highway to hell, Jump de Van Halen, Brian Adams, una de Judas con Javi del Arena en la voz, el siempre bien recibido Enter Sandman de Metallica, Anathema, Alice in Chains, Black Sabbath, Radiohead, Heroes del Silencio y el inevitable Remix del Dragón.
Al final el ambiente era tan agradable y divertido, la peña se lo estaba pasando tan bien y nos sentíamos tan cómodos que incluso, cantó quien habitualmente no canta, tocó la guitarra quien hacía años que no lo hacía y todo ese tipo de cosas que esperamos no se vayan perdiendo en próximas ediciones de esta jam.
Peté un giga de vídeos en la cámara de fotos que poco a poco iré subiendo al tubo y podréis ir viendo enlazados en nuestro foro, pero dadme un poco de tiempo. Por desgracia calculé un poco mal y no tenemos muchos documentos visuales de la última parte de la Jam, al menos grabados con mi cámara.
EsperamoS con ansiedad próximas ediciones de las Jams del Arena, y sobre todo como he dicho antes que ese espíritu de improvisación no se vaya perdiendo porque subirte a un escenario a tocar una canción que ni siquiera conoces de oidas es una experiencia cojonuda, y reafirma una vez más que si no otra cosa al menos si que tenemos una buena dosis de cara dura.
Crónica por Oskar Sánchez, fotos por Oskar Sánchez.