DESDE LAS TIERRAS DE PLATA: Tras nuestro viaje al Oremus de Gijón para ver a Narsilion en el pasado mes de Diciembre quedamos tan impresionados que decidimos inmediatamente que costase lo que costase estarían tocando en Cantabria.
Creo que imaginar sueños imposibles y luchar para ver como se van haciendo realidad es un buen camino hacia la felicidad. Como somos gente sencilla nuestros sueños son sencillos, y poder compartir con vosotros a una banda tan especial como Narsilion, en una ciudad tan difícil como Santander, nos ha proporcionado una colección de sentimientos que recordaremos durante toda la vida. Así de sencillo, y así de trascendente.
Ya a principios de 2006 hicimos una primera tentativa para poder tener a Narsilion entre nosotros, iba a ser una fiesta Pagana con la participación de los Catalanes y de nuestros Cántabros CrystalMoors, dos bandas que tienen mucho que ver, en cuanto a la temática pagana y también musicalmente. Es difícil de entender a primera escucha, pero si profundizáis en ambos estilos os daréis cuenta que realmente las diferencias de forma son muchas menos que las similitudes de fondo, y no sería difícil para ninguna de ambas bandas llevar un tema de la otra a su terreno.
Aquel concierto tuvo que ser pospuesto por una coincidencia de fechas por parte de Narsilion, y finalmente quedó en el limbo durante muchos meses, hasta que el pasado mes de diciembre, tras verles junto a La Gueta la Runa en el Oremus de Gijón decidimos que era momento de volver a intentarlo. El primer paso, ponernos en contacto con Narsilion y buscar un fin de semana lo suficientemente largo como para hacer el viaje cómodo. El segundo volver a contactar con CrystalMoors para comentarles que recuperábamos la idea y contar con ellos en la fiesta.
Desgraciadamente algunos de los componentes de CrystalMoors están ahora viviendo en Madrid, lo que dificulta los ensayos. Además estando centrados en preparar la grabación de su próximo disco vieron imposible poder acercarse a tocar junto a Narsilion. Una pena, porque tanto Narsilion, como CrystalMoors, como nosotros desde la organización sabíamos que era la combinación perfecta, y que la fiesta adquiriría otro sentido mucho más global si contabamos con ambas bandas.
Finalmente decidimos que no había reemplazo posible en nuestro entorno, y que si CrystalMoors no podían estar, Narsilion tocarían solos, llenando el evento con una fiesta pre-concierto en la que pincharíamos algo de Dark Ambient y Dark Folk entre otros estilos poco populares por aquí.
Es necesario que os cuente todo esto para que entendais que cuando la noche anterior al concierto cuando ibamos con Narsilion a tomar unas cervezas al Woodstock, nos encontramos con CrystalMoors al completo de repente todo volvió a encajar. No fue una improvisación ni un apaño de última hora, simplemente sucedieron las cosas como estaban previstas desde el más lejano principio. Y cualquier impedimento o complicación que podría traer el adaptar todo de manera apresurada, no importó lo más mínimo, al fin y al cabo, lo importante no es la música, si no la guerra.
Una vez en la sala, la prueba de sonido se complicó en algunos aspectos, en parte por nuestra inexperiencia en estas lides. Aun así tanto Narsilion como CrystalMoors aceptaron sin rechistar las limitaciones del evento y a las ocho y media estábamos listos para comenzar con absoluta puntualidad.
Si no lo hicimos fue porque a esa hora aun no había más de una decena de personas en la sala, así que forzamos un cuarto de hora más, lo que a la larga hizo que el concierto de CrystalMoors fuese un cuarto de hora más corto, ya que el horario de la sala tuvo que ser bastante estricto en la hora de finalización del evento.
Desde el momento en que Narsilion cruzaron la sala mientras comenzábamos a escuchar la banda sonora del Señor de los Anillos, todo se convirtió en magia. Y si, es cierto que el concierto de Narsilion gana en lugares pequeños, y que las prisas hicieron que no estuviésemos muy finos con el sonido de CrystalMoors, pero el resultado global fue desde nuestro punto de vista increíble.
Me cuesta comentar en profundidad ambos conciertos, como siempre que estamos tan implicados en algo, así que dejaré esa parte para que seais vosotros mismos, los asistentes al evento los que lo comentéis en el tema de nuestro foro que podeis seguir desde el primero de los tres enlaces inferiores. Yo sólo añadiré que cerrando los ojos durante el concierto de Narsilion, es facil trasladarse a Arcadia, y que CrystalMoors continúan siendo muy grandes pese a los meses de inactividad. Estamos ansiosos por la llegada del nuevo disco de ambas bandas.
El culto pagano a la diosa Istha se traslado al Pub Zero, en donde pudimos disfrutar de unas buenas sesiones a cargo de Kike y de Sathorys. Uno de los principales objetivos de la fiesta era dar a conocer el Dark Folk y el Dark Ambient en Cantabria, ya que no hay muchos seguidores de ambos estilos, esperamos que el CD Goethia, las sesiones de DJ´s y el concierto en si hayan abierto esta peligrosa puerta para muchos de vosotros, y que en breve pueda haber próximas citas… puede que Der Blaue Reiter esté mucho más cerca de lo que os pensais. Gracias a todos por conseguir que finalmente fuese un éxito.
Crónica por Oskar Sánchez, fotos por Enrique Salesa.
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