Después del gran papel que Romanthica hicieron en su concierto en Santander junto a HIM uno hubiese esperado que la ciudad se volcase en sus brazos en su regreso triunfal, parecía el momento idóneo para recoger lo sembrado, pero en realidad el rock va de sembrar y volver a sembrar, o como dice mi amigo Pepe de Dardem, trabajo, trabajo y cuando te jartes de trabajar, más trabajo.
Así pues, con el público de aquel macroconcierto bien impermeable, bien amnésico, o bien desaparecido, a pocos días del evento la anticipada iba bastante floja, a lo que sin duda no ayudó que Mikan, el artista local, finalmente no pudiese participar en el bolo ni la amplia oferta de conciertos durante el finde que actuaba como “competencia”. Ante una situación bastante desfavorable decidieron apostar por la fecha en lugar de aplazarla o cancelarla, dejando la entrada gratuita y regalando un disco a quien ya la hubiese comprado, consiguiendo de esa forma un reclamo suficiente para poder actuar ante un Black Bird con un ambiente razonable, que fue aumentando durante la actuación de la primera de las dos bandas, y que curiosamente incluía visitantes de otras comunidades como Galicia o Burgos, que se habían desplazado hasta el Black Bird con gran interés ante la ausencia, de momento, de fechas más próximas a sus respectivas localidades.
4 Villains
De 4 Villains no sabíamos nada de nada, y tampoco hicimos la tarea los días previos para enterarnos. Indudablemente un bolo a dos bandas foráneas en Santander es un error estratégico, pero a nivel estrictamente musical fue un buen acierto que convenció a los presentes. Una base musical sencilla pero efectiva, sobre la que destaca la increíblemente expresiva voz de Almudena, que según pude descubrir después en una pequeña charla está ya curtida en varios proyectos que van desde el Black Metal al Reggae. La energía que desprende es un locurón así que consiguieron que enseguida nos involucrásemos en un concierto divertido, variado y sorprendente. Al parecer están preparando su primer disco, del que ya tienen un adelanto en forma de vídeo. Junto a los temas propios incluyeron versiones del “Zombie” de Cranberries, del “Paranoid” de Black Sabbath, el “Rocking in the Free World” de Neil Young y “Killing in the Name” de RATM, todas bien tiradas, pero menos excitantes que sus temas propios, que supongo irán ganando terreno según la banda vaya madurando.
Romanthica no se achicaron y salieron a por todas, con todas sus virtudes como armas. Son una banda con un sonido muy pulcro, con temas muy bien ejecutados, bien compuestos y arreglados, con muy buenas melodías de voz y directos arreglos de guitarra que van siempre a diana. Se mueven en un espacio claramente delimitado por el rock / metal gótico y el synth pop, que enseguida trae a la cabeza a bandas como Sentenced, Lacrimas Profundere o los mismos HIM, y actualmente no se me ocurren muchas bandas del estilo en España que puedan medirse con su forma de hacer música. El concierto se desarrolló como esperábamos, con solidez, con las primeras filas entregadísimas a cada frase de David y la retaguardia asintiendo ante un gran bolo no sólo para fans, si no para cualquiera que se acercó a curiosidad. El momentazo lo protagonizaron cuando Mikan se subió para compartir micros en “Cuchillos de Neon”. Pese a lo difícil de la noche salieron triunfantes. Romanthica son una banda que ha demostrado no tener ningún problema para medirse en un gran escenario ante bandas internacionales, tienen capacidad para ello y en su tierra natal llevan ya un buen trabajo y una buena legión de seguidores tal y como puedes ver en su DVD en directo. Ahora comienzan a batirse plaza a plaza, fuera de la zona de confort para ganar uno a uno nuevos seguidores y llevar al grupo al punto de popularidad en el que sin duda merece estar. Les deseamos suerte en esa empresa, tienen un buen par de discos en las manos y un gran directo que estamos seguros poco a poco se irán abriendo camino.
Crónica: Óskar Sánchez.
Fotos y Vídeos: Maya C. Cañestro.