Ritxi llegó a la asociación el mismo día de la inauguración, el 19 de abril y entendió, como pocos, el espíritu de la misma, lo que nos movía e impulsaba a nacer, a continuar y a crecer.
Quiso colaborar desde un primer momento y así fue como, desinteresadamente, nos ofreció su arte, su poesía de calle, sus versos directos y tajantes, su golpe de realidad sin filtros, ni adornos, contundentes como hostias, tan necesarias en este mundo sin sangre. Le conocimos a través de unos amigos de siempre, de los que siempre están, de los que acuden a cada llamada sin pedir nada a cambio, más que unas corbatas con chocolate. A las 18’00 hrs. empezaba el evento y, aunque no fuimos puntuales, esta gente nos deleitó durante casi 2 horas porque estábamos en familia, no podía ser el rato más agradable.
Tiempo para la música y la poesía, en un tándem perfecto para el disfrute de los asistentes, una propuesta distinta y nueva entre amigos, un domingo de tarde. Dejaos de Paulo Coelho que Ritxi tiene verdades que contarte. Muchas gracias a Ritxi por su implicación, su colaboración y su arte. Muchas gracias a Los Robinsones, una vez más, esto ya es abuso, no hay palabras que os lo paguen.
Crónica y fotos: Mar García (Devarock).
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