Lejos quedan aquellos tiempos en los que podías diferenciar, a la oreja, a una banda Española de una “internacional”. Siempre hemos tenido buen producto, pero en demasiadas ocasiones nos faltaba el empuje de una buena producción y un enfoque más profesional en la imagen y el marketing que rodea a un lanzamiento. Durante el último par de décadas la distancia se ha ido acortando y podemos decir que hoy es inexistente. Last Days of Eden son de Lugones, pero podrían igualmente ser de cualquier país europeo. El talento siempre ha estado por ahí, pero ahora además tenemos la tecnología, las estructuras y los medios para que brille en su total explendor.
Quién siguiese en su día la carrera de Darksun, seguramente no se sorprenderá de los grandes resultados obtenidos por Last Days of Eden. Ya en aquella banda se veía clara la firme intención de Dani G. de eliminar del todo esa distancia de la que hablaba en el primer parrafo, con unas producciones espatarrantes y muchísimo cuidado en los detalles.
Last Days of Eden se forman hace ya una década y desde entonces han publicado un EP, cuatro álbumes de estudio y un trabajo en colaboración con la Orquesta Sinfónica Oviedo Filarmonía, quedando cada uno de ellos un claro escalón por encima del anterior.
La banda se ha movido siempre en un terreno cercano al Gothic Metal que tuvo su gran explosión a finales del siglo pasado y principios de esto, pero han sabido aportar su propia firma, incluyendo algunos elementos del Power Metal y sobre todo jugando muy bien la carta del Folk Asturiano a la hora de enfocar sus orquestaciones y arreglos.
Butterflies es una joya de principio a fin para los seguidores del género. Ante el evidente desgaste de algunos de los totems sagrados de este estilo no es facil colocar esta obra por encima de los últimos lanzamientos internacionales de bandas ya muy consolidadas. La interpretación es excelente, los arreglos también, el disco está lleno de variedad y sorpresas y como ya hemos comentado ni la producción ni ningún otro aspecto hace deslucir el trabajo. Lo más importante de todo es que está lleno de tremendas canciones, con melodías memorables. No canciones que pasan y se van, si no canciones que llegan y se quedan para siempre.
Impecable.