Hay quien dice que nada sucede por casualidad, es posible que así sea y que el hecho de que la música que vaya a abrir nuestro segundo programa en esta nueva etapa de Foramontanos sea precisamente el de una de las primeras bandas que nos hizo llegar su maketa allá por el 96 tenga algún significado en el orden de las cosas.
Es justo en ese año, algunos meses antes de que NdR comenzase a emitir cuando K.D.K. entra en un hiato que resultaría, a la postre, ser definitivo. Recién publicada su segunda maqueta, Victor, su batería, tiene que marcharse a vivir fuera por motivos de trabajo y la banda para, en principio de manera temporal, aunque no volverían a actuar en directo hasta el concierto de despedida y cierre que ha tenido lugar este pasado 2012 para presentar la reedición que hoy nos ocupa.
Recuerdo con bastante claridad aquel sobre remitido por FAK Records: incluía la maqueta de Pompa Cosmica, la de K.D.K. y creo recordar que también la primera de la fuga. Eran otros tiempos y no todas las bandas locales llegaban a permitirse el lujo de grabar una cinta. Muchas buenas bandas no llegaron a grabar su música, y otras que si tuvieron grabaciones han ido quedando relegadas porque nadie se ocupó de trasladar ese material a un formato reproducirle en el siglo XXI.
Así pues esta edición es un justo ejercicio de memoria. Aunque K.D.K. nunca han sido una banda olvidada, este CD facilita la escucha de aquellas viejas canciones a quienes ya las conocían y se lo pone en bandeja a los más jóvenes para conocer una importante parte de la historia de la música en Cantabria. Sólo hay que echar un vistazo al listado de bandas que participaron en el disco homenaje publicado el pasado 2011, para darse cuenta de que el legado de su sonido y de su actitud caló muy hondo en mucha de la gente que sigue haciendo música a día de hoy.
De hecho, el CD es algo más que una reedición de sus dos maquetas, ya que incluye además un DVD con infinidad de grabaciones en directo, que no sólo te permiten tener material hasta ahora inédito de la banda, si no revisitar o conocer por primera vez los lugares y personas que fueron protagonistas de una movida muy viva a principios de los noventa, durante las 39.360 horas de vida de KDK.
Comentario por Oskar Sánchez
Fotografía por KDK
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