KING CRIMSON – In The Court of the Crimson King
El display del DeLorean marca 1969. Nos hemos trasladado hasta una época en la que aun no se hablaba de “Rock sinfónico” ni de “Rock Progresivo”, los Rolling Stones están presentando su último disco Beggars Banquet y en su concierto en Hyde Park debutaría una banda que iba a dar un nuevo golpe de timón al mundo de la música.
Media década de Psicodelia les precedía, en aquel momento los oídos y las mentes estaban bien abiertas y Robert Fripp iba a reunir a unos cuantos músicos capaces de conjugar todas esas influencias para lanzar una bomba llamada In the Court of the Crimson King.
Aunque nada sale de la nada y el disco y el grupo fueron alimentados por bandas y corrientes anteriores, In The Court of the Crimson King es considerado pionero a la hora de presentar esquemas complejos, incluyendo subdivisiones en los temas y grandes desarrollos instrumentales, con muchas influencias del Jazz y la música clásica.
King Crimson, y este disco en particular es padre de centenares de discos y grupos posteriores desde Spock’s Beard a The Mars Volta pasando por Screaming Headless Torsos. Son miles de bandas en el mundo las que reconocen su influencia, y otras tantas las que la tienen sin ni siquiera saberlo. La formación que grabó no aguantó ni siquiera un disco más y Robert Fripp fue reafirmándose cada vez más como líder y creador indiscutible del grupo, en los sucesivos cambios durante las décadas posteriores. Él suele justificarse diciendo que King Crimson es simplemente “una manera de hacer las cosas”.
La portada fue creada por Garry Godber un programador informático que murío en 1970 a los 24 años de un infarto. Garry no se dedicaba profesinalmente al arte y de hecho el original fue su única pintura, exhibida durante algunos años en las oficinas de EG y ahora en propiedad de Robert Fripp. La impactante imagen se ha convertido en todo un icono del rock y encaja a la perfección con las angustiosas letras del LP.
Comentario por Oskar Sánchez