Tenemos ante nosotros un nuevo disco de Slipknot, cuarto en estudio sin contar demos o maquetas grabadas con otras formaciones antes de sacar su famoso primer disco homónimo. Tras continuar por la senda de la briza y de un sonido más sucio característico de su disco “Iowa”, sacaron en 2004 el “Vol3: The Subliminal Verses”; un disco donde rompieron un poco con su sonido y dotaron a los temas de una mayor melodía, técnica y complejidad que los anteriores.
Ahora nos encontramos con “All Hope is Gone”, un disco que si bien puede seguir perfectamente la senda de su anterior lanzamiento, retoma en muchos de los temas la tiza y contundencia de sus primeros trabajos, mezclada con la técnica y variación de ritmos en los temas más característicos de esta nueva etapa. Cera y lomo a partes iguales. Eso sí, no os esperéis el sonido crudo y sucio de sus primeros álbums, sino todo lo contrario. Y en este trabajo se agradece, ya que el productor “Dave Fortman” ha realizado un trabajo realmente extraordinario, en el que todos los instrumentos suenan como tienen que sonar, nítidos y contundentes, donde se puede escuchar y darte cuenta de quienes han llevado las riendas en este trabajo. Joel Jordison a la batería hace un trabajo bestial, tanto acompañando a la guitarra de Mick en el cual también ha recaído parte fundamental de la composición del trabajo, como del vocalista Corey Taylor quien ha tomado prestados ciertos registros de su proyecto paralelo “Stonesour”.
Nada más darle al play, es perfectamente reconocible una intro en la que sonidos industriales, sirenas, voces de radio y demás parafernalia se juntan estridentemente, dando paso a un pequeño calentamiento de Jordison a la batería en el que te hace estar pendiente de este personaje a lo largo del resto del disco. El siguiente tema, “Gematria” es una de las canciones más cañeras del disco, en las que las variaciones entre un sonido más cercano al metalcore actual y el metal más contundente y pesado propio de unos Machine Head de sus principios predominan en los seis minutos que dura el tema. No es de mis canciones favoritas del disco, pero parece que ha tenido bastante aceptación y muy buena acogida por lo que se puede leer entre los foros de internet por parte de sus fans.
“Sulfur”se trata del tercer tema del disco, el cual continúa un poco por la senda del anterior tema, pero dando paso a ritmos más melódicos sobre todo por parte del vocalista en los estribillos. La cuarta pista, “Psychosocial”, fue la elegida para grabar el primer videoclip del disco, y en este caso si que puedo decir que es uno de los temas que más me gustan del disco. Se trata de uno de los temas donde mejor se puede apreciar la producción. Contundente, con unas guitarras y una batería bestias, limpias, técnicas y compactas en los que te entran ganas de ponerte a pegar botes a la vez que le pegas al headbanging de un momento a otro (o bailaaaaar, como diría Bill Cosby) con un estribillo muy pegadizo propio de lo que es un primer single del disco.
“Dead Memories” se trata de un medio tiempo, donde se puede apreciar más la voz de Corey mezclada con afiladas guitarras en algunas partes del tema y melódicas en otras. Ahora viene otro de mis temas favoritos, “Vendetta”. Un comienzo con unas guitarras dotadas de un sonido más propio de la escuela sueca de Gottemburg que de su sonido personal más yankee, dan paso a continuos cambios de ritmo y velocidad al tema, alternando pasajes melódicos, contundentes, rápidos… para dar forma a uno de los temas más complejos del plástico.
“Butchers Cook” es otro de los temas que más agradecerán los seguidores del sonido más extremo del grupo, para dar paso a uno de los temas que más controversia han causado entre los oyentes del álbum: “Gehenna”. Se trata de un tema lento, oscuro, distorsionado… donde el cantante se atrever a darle un toque depresivo que nunca antes había utilizado. Original cuanto menos, aunque no me gustaría que fuese la tónica de un nuevo álbum de estos macarras. “This Cold Black” es un tema que puede recordar a los Slipknot del primer álbum, donde la presencia de samplers, sintetizadores y ritmos machacones se apoderan de la novena pista del disco.
Como todos sabréis (y si no, comenzad a preocuparos) tras la novena pista viene la número diez, y en este caso lleva como título “Wherein lies continue”, uno de los temas más pesados y gordos del disco. Mola. Pero mola todavía más “Snuff”. No creía yo que estos chicos de Iowa pudiesen hacer un tema como este. Típica balada americana, capaz de ponerte los pelos de punta y donde Taylor demuestra que es un gran cantante y sabe cantar melódico muy bien. ¿Se habrán echado novia? ¿Estarán buscando una? Sin duda este es un tema que podría ayudarles a conseguirlo en caso de que así fuese.
El disco termina con “All Hope is Gone”, tema que pudimos escuchar de adelanto en internet unas semanas antes de que saliese el disco. Para mi se trata de una de las mejores canciones del disco, y una de las más brutas también, muy currada y compleja como la mayor parte de canciones del disco.
Y ahora… ¿qué pasa con los frikis que nos hemos comprado la edición especial? Pues que hemos sido recompensados con 3 canciones en forma de bonus-track que si no las hubiesen metido quizá seríamos más felices. Dos medios tiempos que no aportan mucho al disco en sí y son bastante sosos, y una nueva mezcla de “Vermillion” en medio. Bueno, “Burn Me Away” no está tan mal, pero quizá se quede un poco (bastante) por debajo el nivel general del CD. Al menos el DVD está entretenido, donde podemos ver en forma de un documental titulado “Nine”, al grupo trabajando en la composición y producción del disco en una casa/estudio rural en su Iowa natal y en las sesiones de fotos con sus máscaras para el artwork del CD, con varias bromas y gamberradas como una interesante guerra de grapadoras de por medio. Todo ello empaquetado en un currado digipack con un libreto especial de 40 páginas, lleno de fotos rodeando las letras de este “All Hope is Gone”.
Comentario por Alexi Laiho
Fotografía por SLIPKNOT