Atticus Finch es un abogado de una pequeña ciudad del estado sureño de Alabama racialmente dividida durante los años de la Gran Depresión. Viudo y con dos hijos a su cargo, acepta ocuparse de la defensa jurídica de un campesino negro acusado de violar a una joven blanca. Muchos de los habitantes de la ciudad tratan de disuadirle para que se retire del caso, pero él está decidido a seguir adelante, a pesar de las consecuencias que su empeño en defender a un negro pueda acarrear para él y su familia.
La historia, narrada desde el punto de vista de una mujer adulta que rememora su infancia y la de su hermano mayor en el profundo sur estadounidense, abarca un periodo temporal de tres años, durante los cuales las vidas de esos dos personajes infantiles experimentan profundos cambios. En el transcurso de la acción, su plácida existencia de niños inocentes y despreocupados que, acompañados por un inseparable amigo veraniego, pasan los días jugando a espiar a un extraño vecino al que consideran una suerte de “hombre del saco” de su ciudad, se irá transformando ante las circunstancias. A través de su padre, abogado, y de la labor que éste ejerce en la ciudad, los niños descubrirán los conflictos raciales tan vigentes en aquella época, y su condición de testigos directos del odio racial cotidiano les hará madurar dolorosamente.
Película estadounidense de 1962 dirigida por Robert Mulligan sobre un guion de Horton Foote y basado en la novela homónima de 1960 de la escritora Harper Lee, que fue galardonada con el Premio Pulitzer.