BAD RELIGION – No Control

Comenzaba una nueva década y algunos empezábamos a entender la vida de otra manera. Eran tiempos de cambios interiores, de descubrimientos, de ver pasar los días sin pensar en el mañana. Días en los que lo más importante era sacarse un truco nuevo con el patín, jugar al baloncesto o conseguir que algún colega te dejase una cinta de cassette TDK con un disco grabado en cada cara y algo de relleno para completar el tiempo de más que quedaba libre. Así llegó a mis manos una cosa sencilla, barata, reutilizada, con un sonido atroz, hoy en día en desuso, pero que indudablemente me hizo empezar a entender la música de otra forma. Supongo que todavía haya gente que conserve esa mítica cinta con el Suffer, el Againt the Grain y el No control grabados del tirón. Casi 50 canciones que parecían iguales pero no lo eran, que te hacían circular la sangre a mayor velocidad y que, como alguna bebida de ahora proclama, “te daban alas”.

La mejor trilogía de punk rock que se ha hecho jamás y que posiblemente tiene su culmen en el disco que nos ocupa: NO CONTROL. Así con mayúsculas, porque nunca en la vida he vuelto a experimentar lo que sentí al escuchar seguidas las cinco primeras canciones de este disco. Un comienzo irrepetible, de apenas seis minutos y que resumía toda fuerza, velocidad y melodía de la música de Bad Religion. Change of ideas + Big bang + No control + Sometimes i feel like + Automatic man. Casi nada. El tanden Graffin/Gurewitz funcionando a todo motor y dando en el clavo una y otra vez.

Cuando me ponía esta cinta en el Walkman Aiwa a todo trapo daba igual lo que pasara alrededor. Daba igual lo que dijeran las letras (más adelante leí traducidas casi todas y pude entender toda la importancia que tenían), cómo sonara la cinta o cómo fueran los riffs de guitarra. No hacia falta pensar, solo sentir.

Un disco de 1989 y que junto a los otros dos nombrados anteriormente (Suffer – 1988, Against the grain – 1990) sentaron la base de un nuevo estilo. Poco mas de veinticinco minutos que marcaron la historia de la música y la vida de alguno de nosotros.

Comentario por Bill