AEROSMITH – Pump
Nos vamos a plantar en el año 1989, cuando el hard rock aun era el rey del cotarro, cuando la brillantina y los excesos aun no habían dejado paso a la tristeza que nos inundó a todos en los noventa. En ese año Aerosmith publicarían el album que les abriría por fin la puerta grande por la que luego se colaron como una apisonadora con el Get a Grip, conquistando incluso las listas más comerciales.
A finales de los ochenta, Los Chicos Malos de Boston aun pertenecían sólo al público rockero. Habían tenido una gran década en los setenta que acabó con Aerosmith sumidos en problemas de adicciones y en la mayor crisis de su historia.Aunque la banda nunca paró, la marcha de Joe Perry supuso una incisión profunda en su credibilidad que tuvieron que ganarse de nuevo, poco a poco con buenos albumes como Done With Mirrors o Permanent Vacation.
Este último puso de nuevo las cosas en su sitio para que Aerosmith rematase con el disco que hoy nos ocupa.Si Permanet Vacation ya había dejado el nivel de singles muy alto con temazos como Dude (Looks Like a Lady), Pump elevó el nivel hacia lo desconocido incluyendo muchos de los temas que hoy se entienden como indispensables en su repertorio What It Takes, Janie’s Got a Gun, Love in an Elevator, o The Other Side. El video de Janie se llevó dos premios MTV y Aerosmith vio el filón claro, de ahí que su posterior lanzamiento Get a Grip estuviese tan claramente apoyado en la faceta de los videoclips, con la saga protagonizada por Alicia Silverston y Liv Tyler.
Es probable, por tanto, que Pump significase para Aerosmith uno de sus primeros pasos hacia una comercialidad más descarada, pero lo cierto es que aun durante algunos años se mantuvieron en una línea divisoria muy interesante y que en este tiempo nos ofrecieron algunas de las mejores canciones que nunca han compuesto, tal vez con algunas concesiones a terrenos más poperos, pero con indudable acierto en el conjunto.
Comentario por Oskar Sánchez