AS LIONS + ALTER BRIDGE

Éste viernes nos hemos hecho una escapadita a Madrid para ver a nuestros ídolos Alter Bridge junto con los londinenses As Lions.

A pesar de aborrecer hasta el infinito y más allá, las palmeras existentes en mitad de la Sala Riviera (por favor, una motosierra), no nos íbamos a perder a Kennedy & Cía por nada del mundo mundial. La apertura de puertas, era a las 19:00 hrs., nosotros llegamos sobre las 19:30 hrs. y nos encontramos con una cola que rodeaba casi todo el recinto, el menos fue rapidita la cosa, eso sí.

Fue la vez que más cerca pudimos situarnos en un concierto de Alter Bridge (aunque como Friki Bridges, nunca es demasiado cerca), tras unos 20 minutos de espera a que entrase todo el mundo, comenzaron As Lions, una chavalada inglesa de rollo Nu Metal, los cuales me parecieron una mezcla de Linkin Park y Teksúo. Desconocía totalmente la existencia de éste grupo pero allí pudimos comprobar que mucha gente les sigue, ya que entre los fans que cantaban sus canciones y el entusiasmo de Austin (El cual nos enteramos allí mismo, que es hijo de Bruce Dickinson (Iron Maiden)) para no parar de moverse por el escenario (a quién habrá salido) además de interactuar y animar a la gente, hubo un ambiente chulísimo. Una pena que el sonido no les haya acompañado, ya que prácticamente, se oía solamente voz y batería.

Después vinieron los súper Alter, que no tardaron demasiado en salir, pero a nosotros la espera se nos hizo más larga que un día sin pan. El repertorio de éste concierto, no tuvo nada que ver con los anteriores a los que hemos asistido, el año pasado en la Santana, lógicamente tocaron casi todo su disco nuevo, éste verano en Vaciamadrid ya variaron bastante siendo “fifty-fifty” temas nuevos y viejos, y ésta vez el repertorio ha sido mucho más “personal”, incluyendo temazos como “Open your eyes”, “In living memory”, “Ghost of days Gone By”, etc., los cuales no hemos podido disfrutar en otros conciertos. Si no fuese porque sabemos de sobrísima que están en plena forma, pensaría que es un repertorio de gira de despedida.

Como siempre, el sonido súper potente y compacto (quizá un pelín demasiado alto), que dejó sin pelo a los que únicamente contaban con un mechón, con un Kennedy como siempre, impecable (grupos de personas de hombres y mujeres, gritaban que la voz de Kennedy, les había dejado embarazados), que no flojea ni se le va el tono en ningún momento de principio a fin de concierto (sigo sin entenderlo, ya que “El Kennedy” sufre de acúfeno, un monstruo). A los directazos de Alter Bridge estamos acostumbrados, pero a su cercanía no tanto:  son un grupo digamos correcto y Kennedy siempre tiene una sonrisa de oreja a oreja, pero no interactúan excesivamente con el público y ésta vez hicieron sacar las luces de los móviles, nos hicieron agacharnos (en esos momentos, de ganas hubiese corrido hacia el escenario, pero no quería morir ese día) y levantarnos, nos animaron a cantar alargando canciones tanto en los minutos en los que la luz se fué, como en el resto del concierto manteniendo el calor del público tanto con sus temas, como con el Highway to Hell de los ACDC. Tremonti que siempre fue un trozo de piedra, estaba más expresivo que nunca, marcándose un duelo de guitarras con Myles. ¿Quién ganó el duelo? Ahí estuvo la cosa.

La verdad es que salimos del concierto un poco más emocionados que otras veces (que ya es decir), y muy afortunados de poder ver en plena forma al en mi opinión, uno de los mejores grupos que existen ahora mismo. A los “embarazados”, que sepáis que “El Kennedy” es mi marido.

Crónica por Álex Kennedy, fotos por Álex Kennedy.