La distancia hasta Unquera cada vez se hace más corta. Lo cierto es que desde Torre se tarda parecido a Santander, y el hecho de aparcar siempre a la primera es un gran punto a su favor. Además el horario de los conciertos de Los Bancos de Atrás es cojonudo para poder tomar una después del concierto o irse a tomar una hamburguesa al Tucan y aun así llegar a casa a una hora prudente si no te apetece liarte mucho.
El menú del día para ayer traía dos platos principales. De primero los Logroñeses Baïkal, y para cerrar la tarde nuestros Medussa. Ambas bandas unidas bajo ese paraguas tan amplio que podría denominarse Post-Metal, aunque con notables diferencias que hicieron que la velada fuese variada y muy apetecible.
Baïkal venían presentando nueva formación tras un tiempo retirados de los escenarios reestructurando la banda. Su último disco “Liberate Tutemet et Inferix” es de 2021 y desde entonces han cambiado su batería y su cantante que se estrenaban con ellos en Los Bancos. Los que les vieron en el Black Bird en su anterior visita afirmaban que el cambio ha afectado a su sonido, y los temas del CD dicen lo mismo. La esencia permanece, el concepto moderno de mezcla de distintos ambientes, la música “paisajística” y los cambios de dinámica propios de todo “post” que se precie. Sin embargo, la nueva voz utiliza más recursos del screamo y los pasajes que estaban recitados, casi rapeados se convierten en declamaciones desesperadas que traen a la cabeza el hardcore emocional. Muchos son los puntos a favor de Baïkal, guitarristas con recursos traidos de distintas fuentes del metal, que no se cortan al incluir riffs cabezones, arpegios cristalinos, tapping, o melodías con el E-Bow, una base rítmica muy compacta con muy buen bajista y batería y por delante de todo ello la sorpresa de descubrir a un cantante que daba su primer concierto (en la vida) afrontándolo con una entereza y energía envidiables. Todo un descubrimiento esta peña.
Cuando salieron Medussa la gente ya estaba bastante arriba y remataron con un bolo sencillamente perfecto. Creo que ya he dicho suficientes veces que aquí hay calidad para medirse frente a frente con cualquiera. Son enormes en ejecución, consiguen poner a todo el mundo en pie con su actitud sin decir ni una sola palabra y lo más impresionante de todo tal vez es su manejo de la dinámica y el sonido incluso en un lugar pequeño como los bancos, tocando a pelo con los amplis a fuego. Solidez es la palabra, la solidez que da el tiempo, van reposados porque llevan tocando toda la puta vida y tienen medido cada mínimo detalle. Cuando terminaron el concierto había cola en el merchandising, no digo más. Alguno se echaba las manos a la cabeza, pensando que tenemos esta joya aquí al lado y aun no la habían descubierto.
Los Bancos son un ejemplo para todos. Una cesión municipal de un ayuntamiento que parece entender que un circuito cultural activo es importante para que un pueblo esté vivo, y además un activo económico que atrae a un flujo de gente que podría estar dejando su pasta en otros bares y otras hamburgueserías. El trabajo de la asociación es espectacular, sacando a huevo cada noche, haciendo la promo, propagando los resultados en las redes… no me estraña que cada vez más gente quiera tocar allí. La entrada inversa es además una forma de hacer partícipe a todo el mundo del proyecto. Llegar y poner el dinero en el bote no es ya pagar por el espectáculo, si no mantener vivo el sueño de tener un lugar propio.