BAÑAPERROS + CORDURA

De nuevo en el trampolín del intrusismo informativo y cacharreando una crónica de la gran noche patrocinada por el talento de Bañaperros y Cordura en la A. C. OCTUBRE.

Por partes:

1) El lugar

Es un privilegio poder contar con espacios de espíritu rebelde y autogestionario en el que un grupo de personas dejan su tiempo y su trabajo de una manera altruista e idealista. Sin más (ni menos) ambición que hacer germinar vida en un suelo de una especial dureza. Los medios y el trato una vez más hicieron que las bandas se marchasen sinceramente agradecidas por la amabilidad y el respeto que habían sentido. Resulta que hay grupos de personas que con medios limitados pero con la convicción de picar la piedra que haga falta ponen al descubierto las pocas miras y falta de interés de instituciones y cabezas ataviadas con sombreros ejecutivos. No vamos a avinagrar el relato, gracias sinceras a quien las merece y sí estoy háblandoos de la A. C. Octubre. Si no conocéis el espacio, pues ya sabéis.

2) Las bandas

Dos grandes bandas, una de trayectoria dilatada y otra en pleno desarrollo pero con mucha mili en los hombros.

Cordura estaban en la segunda fecha de ciclo de conciertos del nuevo disco, Noche Eterna, en cuya edición participan, por cierto, un pequeño y difuso colectivo más refractario a las exigencias de la promoción digital que Unabomber. CxDxIx y un bar, perdón, mucho más que un bar, un refugio de outsiders torrelaveguenses, El Subterráneo; tras cuya barra podéis encontrar algunas caras que también os podéis encontrar en los escenarios (no del crimen). Cantabria, aunque no sea esto visible como debería, cada vez escapa de sus clichés más odiosos y está en el mapa gracias a gente y colectivos como los que acabo de mencionar. Máximo respeto.

Los muchachos ya habían roto el hielo el jueves en el Antzoki de Bilbao jugando en casa con éxito de público y crítica y de paso venían ya quitando los nervios de empezar una nueva etapa – dirección musical en el grupo. Reinventarse sin dejar de reconocerse es una cosa jodida pero ayer se vio que lo estaba haciendo con notable flow. Siendo un grupo ecléctico en el que las influencias personales puede pasar desde la psicodelia sesentas o el garaje, al proto-hardrock, los clásicos de los 90 o el punk rock, no es recomendable colgarles una etiqueta. Son seis discos y más de dos décadas de trabajo y se nota mucho, ahora con una especie de búsqueda de un sonido más crudo, con más presencia de teclados y más experimentación. Es mejor oírlo que leerlo, así que ale! Cómo siempre estuvieron sólidos y potentes, además son una gente estupenda que tiene con Torrelavega un vínculo especial.

Bañaperros clavaron las grandes canciones de su debut con una energía y un punch especial. Después de verles tres veces el listón estaba alto, pero se lo saltaron. En el alumbramiento del grupo estaba sobre mesa nombres como Sebadoh, Yo La Tengo, Binderman o Lagartija Nick, pero como suele pasar, los acordes y el talento fueron por donde les dio la gana, de ahí el sonido tan personal de la banda.

Parece que Juan dejará vacante el puesto de guitarra y ayer era su despedida, agridulce por despedida pero con una complicidad musical y personal evidentes. Ahora empezará otra etapa que seguro que también estará de la ostia. Es lo que pasa cuanto tienes la capacidad de generar canciones memorables, algo al alcance de no tanta gente.

3) La gente

Día difícil por la oferta variada e interesante que había entre Torrelavega y Tezanos, donde el cartel era de varios kilates, pero hubo público para todo y una buena asistencia, así que hay que dar también las gracias a la gente que se animó.

Qué haya más noches de estas que te alegran la vida.

Roque Erickson