El disco de esta semana es pura presión y mala leche… Y para redondear… ¡A toda hostia!
Lo abren los valencianos El Hambre y nada más comenzar, suena sobre un colchón de rasgueos de guitarra un extracto del Amanecer de los muertos ([…] cuando no quede más sitio en el infierno… ¡los muertos caminarán por la tierra!) que da paso a el primer corte de los mismos: “Desmembrado” el cual nos pone sobre aviso: esto va a piñón fijo, y el piñón no varía a lo largo del trabajo de estos chicos. Desde ahí se abren camino con “Confundes el bien con el mal” que deja entrever algún ramalazo de hardcore entre ritmos veloces y furiosos, después a “Mandíbulas de Metal” un delirio de apenas quince segundos con una intro y un outro exquisitos que continúa con la que para mí es mi favorita de su nuevo material: “Largo pero Gordo” un tema con un regusto d-beat que en ocasiones parece que te va a dislocar el cuello.
Pero al cambiar la cara, llegan Crisischrist… Que consiguen no sólo mantener la biela… Sino subirla todavía más… “Control” posiblemente es uno de los temas más insanos y agobiantes que he escuchado en mi vida… En “Ruido de Sables nuevo Orden” se entremezclan blast beats y breakdowns haciendo que el mal rollo se eleve a niveles exponenciales. “Hasta que vuestra mierda se nos lleve” sigue manteniendo el nivel de brutalidad y da paso a el cierre del disco: “Tumbas” momento en el cual descubres con lástima la peor parte de este split… Y es que se hace demasiado corto.
Pero las cosas como son… En poco más de diez minutos estas dos bandas han logrado concentrar en nueve canciones una mezcla de grindcore, crust y death metal que te vuela la cabeza.
Y eso, siempre es de agradecer ¿no?
Comentario por Grumete
Fotografía por EL HAMBRE – CRISISCHRIST