Han pasado 10 años desde que Bruce Wayne, viejo y cansado, decidió retirarse de su vida de superhéroe (Particularmente, por la muerte de su antiguo pupilo Jason Todd). Como parte de sus nuevos hobbies, Wayne se convierte en un alcohólico que le gusta participar en peligrosas carreras de autos como diversión. En el inicio de la historia, se puede ver a Bruce financiando la reconstrucción facial de Harvey Dent/Dos Caras (Two Face) con la esperanza de “vencer a sus demonios“. A la larga, Bruce comienza a ser perseguido por sus viejas pesadillas (Su caída a la cueva y la muerte de sus padres) al estar viendo en su casa una película de El Zorro (La película que lo llevaron a ver sus padres la noche que fueron asesinados) y ver en los noticieros anunciar que el crimen en Gotham está peor que nunca. Tras todas estas señales que vuelven a despertar su obsesión, y justo en el preciso momento en que empieza una tormenta en Gotham City, Wayne toma de nuevo el manto de Batman.