EMBRUJO PAGANO EN EL PÁJARO NEGRO
En más o menos seis años The Wizards han conseguido tocar el cielo con la punta de sus dedos. Estos musicazos no han parado de regalarnos discos sobresalientes, conciertos inolvidables y de cosechar un éxito tras otro desde que la banda se formase en el año 2013.
Sus dos primeros trabajos son un ejercicio de buen gusto, elegancia y virtuosismo difícil de igualar. La banda supo utilizar la mágica receta que encumbró a leyendas como Black Sabbath y Led Zeppelin y no solo salieron victoriosos, si no que la hicieron suya consiguiendo que por momentos te olvidases de las bandas mencionadas anteriormente. El premio a tantos años de dedicación musical ha llegado con “Rise Of The Serpent”, un trabajo que da otra vuelta de tuerca a su occult rock y que les está colocando poco a poco en lo más alto de las listas nacionales de la música rock y metal e incluso les está facilitando el acceso a la escena internacional. Llevo siguiendo a la banda desde que descubrí su primer trabajo, pero desgraciadamente nunca había tenido la oportunidad de disfrutar de uno de sus conciertos. Había estado muy cerca, pero las circunstancias siempre habían conseguido que The Wizards fuese mi banda maldita en ese sentido. Finalmente, los astros se alinearon para que el viernes once de enero pudiese asistir a uno de sus shows y puedo decir que desde que la banda saltó a las tablas y tocaron los primeros acordes, me convencí de que todas las crónicas que había leído sobre ellos no habían sido gratuitas. Todo encaja a la perfección cuando te enfrentas a uno de los directos de la banda, es ahí cuando te das cuenta de la calidad de sus músicos y del increíble talento de su frontman sobre el escenario.
La banda subió al escenario y comenzó el concierto con la poderosa “Apocalyptic Weapons”. En cuanto George Dee se descolgó con el punteo inicial de este tema me di cuenta de que la banda ha vuelto con más fuerza que nunca. En esta canción los guitarristas Phil The Pain y George Dee crean un demoledor muro sónico que se compenetra a la perfección con la base rítmica de Count Baraka y Dave O. Spare. El cantante Ian Mason atacó la canción con una entrega y una energía impresionantes. El tema posee un estribillo pegadizo y coreable ideal para levantar el puño y los cuernos en sus conciertos, así que desde el minuto uno tuvieron al público a sus pies. The Wizards no nos dieron un segundo de respiro y continuaron el concierto con “Destiny”. Esta canción es un impresionante trallazo con un estribillo delicioso. George estuvo colosal a las seis cuerdas, nos arrolló con escalas dignas del mejor Tony Iommy. Me gustaría resaltar la labor de Dave en este tema, sacudió con tanta fuerza su batería que parecía que fuese a descoyuntarla.
https://thewizardsrock.bandcamp.com/
Después de regalarnos los dos temazos iniciales de su nuevo disco, los chicos ejecutaron el primer tema de su segundo álbum. Avidya rompió con la energía de un trueno, esta canción me proporcionó el punch que me faltaba para estar a tope lo que quedaba de concierto.
Seguidamente nos obsequiaron con la energía y el poderío de “Aftermath”. George y Phil volvieron a brillar con luz propia en este temazo. Los ritmos de Phil fueron el vehículo perfecto para que George navegase hacia universos sónicos desconocidos con sus increíbles escalas. La banda alcanzó cotas épicas en lo que a belleza y energía se refiere en los temas “Who are You Mr Gurdjieff? y “Age Of Man”. Durante un momento recordé a las chicas que protagonizan el vídeo que acompaña a este tema último tema y eché en falta un ritual similar sobre el escenario de la sala Black Bird. Supongo que no se puede tener todo ¿verdad?.
Los brujos nos volvieron a poner el orbita con “Calliope” y sobre todo con “Conjure”, demostrando que pueden pasar de la belleza a la distorsión más salvaje con una maestría impresionante. Casi sin que te des cuenta. Cuando le llegó el turno a “Strings Synchronise” consiguieron que se me erizasen los bellos de la nuca, simplemente no se puede tocar mejor.
The Wizards fueron cerrando poco a poco con la belleza y la elegancia de “Vision Of Inner Death” y “Stardust”. Ian nos volvió a deslumbrar con sus impresionantes registros y George Dee y Phil the Pain le sacaron todo el partido a sus habilidades guitarreras obsequiándonos con sonoridades de todo tipo.
Y eso fue todo, The Wizards superaron su prueba de fuego con creces. Este nuevo álbum y la calidad de sus conciertos puede colocarles muy arriba en el panorama de la música rock y metal. Ningún amante del hard rock y el heavy metal debería dejar de escuchar su nuevo álbum y mucho menos dejar de verles en directo. Han vuelto a los escenarios con más hambre que nunca y son absolutamente mágicos.
Crónica, fotos y vídeo de Nacho García Álvarez.