PARECIDO: El siempre inconmensurable duo vuelve a visitar Cantabria y por fortuna y de chiripa conseguimos un par de entradas para no perdérnoslos, total mejor estar viendoles a ellos que en la calle delinquiendo.
Intentar escribir un artículo sobre una actuación de Faemino y Cansado es tan absurdo como su sentido del humor, así que me conformaré con dedicarles unas lineas como homenaje y abrir un tema en el foro para que recordemos algunos de los mejores momentos sin que nadie de los que no estuvieron se enteren de que narices estamos hablando. Parecerán un montón de frases inconexas, pero de repente llega el fogononazo de conocimiento y sin más, entiendes lo que es Australia.
Me parece muy acertado el título que le han puesto a el nuevo espectáculo. Si alguien te pregunta que tal está el nuevo de Cannibal Corpse podrías aplicar la misma frase: Parecido. Pero parecido no es lo mismo, osea, si les has visto un millón de veces ya sabes por donde van los tiros, incluso podrás reconocer algunas partes que ya has visto en otras ocasiones, pero hay las suficientes novedades como para que merezca la pena pagar la entrada.
En esta ocasión no es desbarre puro y duro, como la última vez que les vi, si no que han estructurado algunos sketches bastante descacharrantes y algo más de pantomima gestual. Faemino nos descubre un inusitado y desconocido hasta ahora talento para las imitaciones y el baile contemporaneo e incluso se atreven a contar con la colaboración de un voluntario del público, para organizar un pequeño concurso de cultura general, algo completamente nuevo en sus espectáculos y que le da una nueva dimensión a todo el show.
En fin, como digo, escribir sobre algo divertido es bastante aburrido, así que mirad a ver conseguís entradas para verles en algún sitio, aunque sea desde el asiento más lejano del teatro como fue nuestro caso (total, tampoco es que visualmente te pierdas mucho). Si algún día Madrid es ciudad olímpica, espero que nosotros también sepamos valorar lo nuestro y les veamos tomarse un copazo de coñac en la ceremonia de clausura.
Crónica por Oskar Sánchez, fotos por Arturo Saz.