Violar al Escenario: La escena oscura toma fuerza en Cantabria. Además de los grupos más o menos relacionados con estos estilos que están surgiendo por aquí comenzamos a recibir interesantes visitas de otras comunidades.
Como comienzo a esta fenomenal velada, nada menos que un grupo como No Romance, cuyas ideas tanto estilísticas como compositivas no solo me parecerme estupendas sino que además suponen una arriesgada apuesta por la originalidad al buscar con ellas caminos musicales apenas explorados por estas tierras en estos momentos.
El repertorio es realmente variado y sus temas entran a la primera. A los conocidos “A Program Life”, “Fame ’05”, etc… no faltan otros temas como los excelentes “Vampiria” o “Dream” -mis favoritos- que añaden un toque más oscuro y atmosférico a su música.
Siguiendo la trayectoria de esta banda he sido testigo de como ha evolucionado consiguiendo un sonido cada vez más compactado, en el que la participación de cada uno de los instrumentos guarda un perfecto equilibrio con los demás dando como resultado un pop con aires ochenteros ejecutado con gran pulcritud e influenciado por bandas como Depeche Mode, The Cure o New Order.
A destacar también la confirmación absoluta como “animal de escenario” de su vocalista, Dako, cuya voz de una tonalidad eminentemente grave sonó con gran potencia y su desenvolvimiento dentro -¡y fuera!- del escenario dejo boquiabierto al personal llegando -como decía alguno- a “violar al escenario”.
04Tenía muchas ganas de ver actuar a Gestalt en directo y más aún tratándose, en este caso, de un concierto celebrado en una ciudad como Santander.
Para los que asistimos no cabe duda de que ha sido un gran acontecimiento asistir a un concierto de un grupo como éste, totalmente distinto a lo que acostumbramos a ver por estos lares.
Lo primero a destacar fue el ver como solo dos músicos -Pablo y Miriam- se repartían todo el trabajo de la banda a la perfección dotando a los temas de una mayor densidad de sonido que en las propias grabaciones.
Pronto nos dejamos llevar por el trepidante ritmo de unas bases secuenciadas sobre las que se apoyaban las melodías de un bajo con un efecto de flanger muy contundente, una guitarra que intercalaba distorsiones con arreglos de gran limpieza y unas voces con un descaro de lo más refrescante.
Aparte de los ya conocidos “Milagro”, “Doctor Extraño” y su personal revisión de “M” (The Cure), pudimos disfrutar de temas como el atmosférico “Caso Perdido” o la visceral y desgarradora “Voces” que entusiasmaron particularmente al público asistente.
El concierto fue a más en cuanto a intensidad y ciertamente nos quedamos con ganas de haber escuchado más pero desafortunadamente nos alcanzó la hora del inevitable cierre de la sala. Al final, la discusiones sobre si hacían postpunk electrónico u otro estilo, si sus bases eran del estilo de Alien Sex Fiend o sus melodías en plan The Cure y Clan of Xymox solo nos llevaron a la conclusión de que habíamos visto a un gran grupo con un estilo propio difícil de encasillar.
Crónica por Enrique Salesa, fotos por Enrique Salesa.
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