Y nos Espera el Turborock: No podemos estar en todos los sitios, pero hacemos lo posible para que nuestros amigos nos cuenten los conciertos a los que van. El Panoli y Neo nos hacen de reporteros y nos traen fresco lo del IN
Antes que nada dar las gracias de Del Fuego, cuesta ir a un festival y no sentirte ganado, y el sábado nos trataron como personas, bien es cierto que éramos alrededor de medio millar, pero que te reciban en la puerta de la entrada con una sonrisa, que los de seguridad no tengan pinta de salir de una película de malotes dispuestos a abrirte la cabeza a la primera de cambio, que en las barras te traten con respeto, celeridad y que encima se les vea que disfrutan de la música, que puedas salir al parque con tu cerveza a fumar y comer, no es lo habitual. Por todo ello, ojalá los números cuadren y tengamos una tercera edición, porque al menos nosotros repetiremos. Eso si, los bocadillos son mejorables.
A los Fucking´BolloCKs apuesto a que los veremos en una sala pequeña y la pondrán patas arriba, éramos aún pocos, pero buen comienzo.
Jon Ulecia se presentó con el guitarrista de Mermaid (el primer grupo stoner de este país) y Green Manalisi en sus Cantina Bizarro, espero con ganas su segundo disco “que saldrá en septiembre”, pinta tan bien o mejor que el primero a tenor de lo que ya nos ha presentado en Liérganes hace unos meses y el sábado.
New Reamon no es santo de mi devoción pero dieron un concierto bastante más contundente de lo que me esperaba, una sorpresa para mucha gente.
Lo he intentado con Menhai, solamente saber quién la acompaña es suficiente para darle un voto de confianza, pero no he podido. Todo el mundo habla maravillas, y si, canta muy bien, pero me agota y las canciones no me emocionan.
The Jayhawks son muy muy muy grandes, concierto de los que recuerdas y contarás lo de “yo estuve allí”, pero me hubiese gustado que no dejaran de lado la etapa sin Mark Olson, es preferible que recuperen unas cuantas canciones maravillosas de esos discos y alguna de la carrera en solitario de Mark. Momentos como el “blue” o “bad times” va ser difícil volveros a vivir por estos lares en mucho tiempo. La prueba del algodón es que alguien que unicamente conocía una canción (que ni siquiera tocaron) acabe el concierto emocionada.
Eli “paperboy” Reed fué un buen fin de fiesta bailongo, esta vez no había lugar para comparaciones con la bestia parda de Sharon Jones, simplemente nos dejamos llevar y lo disfrutamos, aunque resulte un poco previsible.
En definitiva, a pesar de las bajas en el cartel (recupérate Micah P. que tenemos curiosidad por tu visión del “trompe le monde”), ha resultado una tarde muy satisfactoria.
Y nos espera el Turborock, ganazas.
Crónica por El Panoli Optimista, fotos por Neo.
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