De Vuelta a los ochenta: Tiene que ser un lujo para el organizador de Lorca Rock poder ir trayendo uno por uno a su pueblo todos los grupos que le molaban hace unos años. Este 2006 de nuevo un cartelazo lleno de leyendas de nuestro rollo. Victor Franquelo nos lo cuenta.
Otra aventura más, otro festival más, 12 horas de calor, sudor y cansancio, 12 horas de música en directo. Así son estos festivales, aunque suelen merecer la pena. No llegamos al recinto del festival a primera hora ni vimos a todos los grupos, tampoco era nuestra intención, teníamos bastante claro lo que queríamos ver. Este tipo de festivales son variados y hay tiempo para hacer un poco de todo: pasear, acercarse a los puestos, tomar algo, comer y, por supuesto, escuchar buena música.
El Lorca Rock de este año estaba organizado en dos escenarios, alfa y beta, uno bastante más grande y más orientado al Hard Rock y otro más reducido y bastante más “cañero”.
El primer grupo que nos acercamos a ver fue Tigertailz, en el escenario grande. Sólo nos asomamos por allí, el sonido era bastante malo y el grupo no nos llamó demasiado la atención. Otra reunión más de viejas glorias, en este caso del Glam Rock de finales de los 80 (otro grupo más que quiso seguir la estela de Poison), poco más que añadir.
Sin cambiar de ubicación pudimos disfrutar de algo un poco más interesante, Gotthard. Una buena banda de Hard Rock con unos cuantos años ya de carretera a las espaldas y con temas que se han convertido en auténticos clásicos del estilo.El sonido seguía dejando bastante que desear (el recinto no era el más adecuado para disfrutar de un buen sonido, sin duda, aunque con buenos técnicos se consiguen muy buenos resultados, como comprobamos más tarde), pero resultó entretenida la media hora que estuvimos viéndolos. En ese momento, una parte de la “expedición” nos movimos al otro escenario buscando algo más “cañero”.
El primer grupo que vimos allí fue Nightrage. Efectivamente encontramos lo que buscábamos, ritmos acelerados, guitarras cortantes y voces desgarradas, pura adrenalina. Lo que no encontramos fue un buen sonido, todo lo contrario, el sonido era pésimo, pero no nos importó demasiado. Buen concierto el de Nightrage del que destacaría el trabajo del batería, Fotis Benardo. También pudimos apreciar los primeros “pits” del día.
Un paseo por el recinto y otra vez al mismo escenario para ver a Onslaught. Ingleses, clásicos de la escena Thrash Metal de finales de los 80 y principios de los 90. Sonaron bastante mejor que Nightrage y ofrecieron una hora aproximadamente de Thrash Metal em estado puro, con canciones de todos sus discos. Muy activos sobre el escenario, sobre todo el bajista (con el que más tarde compartimos “pit” viendo a Exodus). Buen concierto también.
Después de este concierto descansamos un buen rato y aprovechamos para reponer fuerzas comiendo algo mientras escuchábamos de fondo a House Of Lords en el escenario grande (tampoco vimos a Hanoi Rocks anteriormente). Durante el concierto de House Of Lords escuchamos que se estaba grabando un DVD, lo que no sé es si sólo de su concierto o de todo el festival, habrá que estar atento.
Tras House Of Lords llegaba el turno de Ill Niño en el mismo escenario. Hubo que esperar bastante rato a que se solucionaran unos problemas de sonido, con el bajo primero y con una de las guitarras después, para que empezara el concierto (problemas que, por cierto, no terminaron de solucionarse del todo hasta la tercera o cuarta canción y que se extendieron a la voz también, no sólo durante este concierto). Fue una actuación divertida, muy potente, consiguieron que nos moviéramos mucho. El sonido fue algo mejor pero no terminaba de ser del todo bueno.
Después de un pequeño descanso tomamos posiciones cerca del escenario para ver el primer gran concierto de la noche, Whitesnake. Fue el grupo que más gente congregó, no se veía el final mirando hacia atrás. Aquí es donde pudimos comprobar lo que se puede conseguir con un buen técnico de sonido, hubo quien comentó después que no sonó bien pero eso dependía mucho de la posición en la que te encontraras (no era el recinto más adecuado, como comentaba antes), en mi opinión en las primeras filas el sonido era impresionante. El concierto resultó perfecto de principio a fin con un repertorio bastante similar (por no decir casi igual) al del DVD editado a principios de este año. Memorable espectáculo el que tuvimos la suerte de disfrutar de una de las grandes bandas de Hard Rock de los últimos 25 años, sin duda alguna.
Nos asomamos un poco al concierto de DevilDriver (que parecía estar bastante bien) y de Twisted Sister sólo vimos el principio de su actuación porque queríamos ver a Exodus en el escenario pequeño, me dio pena la verdad, aunque no me arrepiento. Tenía la oportunidad (afortunadamente han sido unas cuantas este último año y medio) de ver, por primera vez en este caso además, a uno de los grandes del Thrash Metal y no la iba a desaprovechar. Tremendos, en plena forma, con todo un lujo a la batería, el señor Paul Bostaph, al que pude felicitar en persona después. Estuve todo el concierto en primera fila, disfrutando como cuando tenía 17 años. Hubo bastante menos gente que en otros conciertos debido a la hora. El sonido fue muy bueno. Gran concierto.
Ya sólo faltaba el fin de fiesta, nada más y nada menos que Queensrÿche, aunque hoy en día son una triste sombra de lo que eran. A pesar del show teatral que “amenizó” toda la actuación, con Geoff Tate interpretando escenas de los dos “Mindcrime”, su concierto me resultó frío y algo improvisado. Queensrÿche siempre han sido un grupo muy perfeccionista en directo y lo del otro día distaba bastante de ser perfecto, demasiados problemas de sonido al principio para ser ellos, sobre todo después de haber visto lo que fueron capaces de hacer Whitesnake unas horas antes. Interpretaron temas de los dos “Mindcrime” y del “Empire”, los antiguos bajados claramente de tono lo que hacía que algunos dobles de guitarra (casi todos) sonaran “extraños”, por decirlo de alguna forma, los nuevos no me gustaron, se nota demasiado el peso que tenía Chris De Garmo en este grupo. No me produjeron ninguna sensación, algo de tristeza quizá, aunque lo esperaba.
En todo caso, un gran festival. Esas han sido mis impresiones de él.
Crónica por Victor Franquelo, fotos por Victor Franquelo.