Cuando hace diez años vi a Crayolaser por primera vez, me quedé absolutamente descolocado, flipándolo con el talento de unos chavales que no habían podido tener tiempo material para escuchar el Court of the Crimson King por las dos caras y ya estaban tan empapados de sinfónico setentero hasta el punto en el que parecían ser viajeros de otra época.
Los Estanques fueron para mi una evolución bastante natural de aquel grupo, aunque en teoría sigan funcionando en paralelo. Como si Iñigo hubiese hecho un esfuerzo de concrección para aplicar estructuras Pop al enreversado discurso del prog. Pero es que no es sólo eso, en Los Estanques hay Jazz, hay Funk, hay Clásica… Yo, sinceramente, es que no he visto cosa igual. No sabría decir un grupo como ellos. Lo mismo les sacas influencias de Quincy Jones, que de los Jazz Messengers, que de Deep Purple o Canovas, Rodrigo, Alfonso y Guzmán. Todo siempre aderezado con una pizca de Monty Python… La Hostia, ¡Joder!
Siendo 28, alguno pensó que le estaban gastando una inocentada cuando le dijeron que no había entradas desde hacía días. Pero no. Lo han, hecho, sala a reventar, tocando solos, a diez euros el ticket. Con un público entregado a liarla como si fuesen un grupo de moda, hasta el punto en que Iñigo temió por la seguridad de sus teclados, en vano, porque al final acabaron recibiendo una paliza de sus propias manos.
Ni siquiera los constantes acoples consiguieron estropear un concierto perfecto. Salieron aclamados por la puerta grande, se han hecho grandes ellos ante nuestros ojos, y ni siquera nos han dado tiempo a darnos cuenta.
No pienso contar más, si lo estáis esperando. Haber ido. O estad atentos a la próxima. Yo llevo una década entera sin salir de mi estupor y es que francamente aun no me explico como han conseguido embaucar a tal cantidad de gente para escuchar una música tan jodidamente compleja. Sí, talento a carretillos, originalidad y genialidad, muchísimo trabajo para llevar adelante un bolo tan bien soldado. Tienen de sobra de todo eso, pero ¿Desde cuando es la llave para gustarle a nadie?