“Bueno, hoy vamos a hablar de un tema que me toca bastante la polla…”
Esta frase con la que Chevas comienza uno de sus artículos, podría decirse que es la esencia de su fanzine “Enciende la Mecha”: hardcore, insolencia, verdades incómodas, punkrock, gritos, bofetadas, “peinetas” a las injusticias… y humor, pero no humor facilón, no, me refiero al ácido, del que te pega un puñetazo en el estómago y aún así te tienes que reír.
Cuando tienes en las manos un fanzine así, tan currado y con tantxs colaboradorxs, te preguntas por qué no hace más que sonar esa cantinela de que “Torrelavega culturalmente está muerta”.
Si solo nos dejamos deslumbrar por los grandes conciertos y festivales, nos dejaremos por el camino otros eventos que, aunque no se anuncian con carteles en las calles ni a bombo y platillo en redes sociales, demuestran que la cultura sigue muy pero que muy viva en esta ciudad. El pasado sábado 21 de julio lo pudimos comprobar cuando Chevas nos convocó en el Groez (calle Argumosa) a la presentación del número #8 de su “Enciende la Mecha”.
El evento fue amenizado (¿no os suena casposo este término, así… como de verbena?) por Super Busty Samurai Monkey que con su “punk terrorista a 8 bits” nos dejaron a todos los presentes con el culo torcido: actitud y letras corrosivas… ¡así se hace, joder! Podéis oírles en el CD que acompaña al fanzine junto a otras 23 bandas más que son pura delicatessen.
Si estás cansadx de los libros “best sellers” veraniegos y buscas una lectura amena para llenarla de arena y manchas de bronceador, te recomendamos el “fanzine hijo de puta” por excelencia: Enciende la Mecha #8
Cómpratelo, no seas rata. “El Richal” quiere tu pasta.