N.W.O.G.C.C. Con mucha ilusión vemos como parece que la cosa arranca y nos encontramos ante una nueva ola de buenos conciertos en Cantabria. Saxon llegaron, tocaron y vencieron, bautizaron la plaza en lo que a grandes eventos metalicos se refieren, ojalá se repita.
Debe ser el primer concierto en la puta historia del Rock & Roll que empieza puntual, más estando anunciado a las ocho. Para una vez que nos tomamos con calma lo de llegar a la hora el resultado fue que me perdí unas cuantas canciones de los teloneros, Vanderbuyst. No les tenía fichados de antemano, pero las cuatro o cinco canciones suyas que nos dio tiempo a ver me bastaron para saber que habían dado un buen concierto. Son una banda Holandesa, formada en 2008 que reconocen influencias de UFO, Rainbow, Thin Lizzy, Deep Purple, Van Halen y ZZ Top osea, como ellos mismos dicen en su web Hard Rock de los 70s y 80s, Rock Clásico y un toque del inicio de la nueva ola del Heavy Metal británico. Una buena elección por tanto para telonear a Saxon. En compensación por el trozo que me perdí les pillé su último CD “In Dutch”, así que la próxima semana compartiremos algún tema en el programa.
Vaya por delante el hecho de que yo no soy un gran fan de Saxon. Aun así, de entre todas las interesantes ofertas de este fin de semana decidí acercarme a esta por varios motivos. El primero es que Santander crece en la talla de sus eventos, parece que mucha gente trabajando en distintos frentes está consiguiendo poner Cantabria en el mapa y si nosotros podemos empujar un poquito también vamos a intentar hacerlo. El segundo es que Saxon siempre me han coincidido en un par de festivales en los que he visto algún concierto suyo, pero no siendo, como digo una de mis bandas favoritas y habiendo la típica carga de conciertos de los festis nunca les había visto prestando la merecida atención, así que verles en solitario y dedicarles dos horas se presentaba a nivel personal como una oportunidad cojonuda para profundizar en una banda que, no olvidemos, fue autentica pionera de la N.W.O.B.H.M.
Entre el público me encontré un poco de todo, desde die hard fans con camiseta descolorida de la primera gira de Saxon por España que se habían hecho bastantes kilómetros para llegar a Santander, hasta curiosos que no habían escuchado a Saxon ni en cinta pero que se habían acercado a ver un evento potente en el escenario Santander. En general, creo mucha gente que estaba un poco en medio, Saxon son parte de la historia, el que más y el que menos les tiene cariño y respeto y era una buena oportunidad para ver un gran concierto en Santander, a la vez que para cruzar los dedos y desear que sea el primero de una larga lista. Como ya dije la semana pasada con respecto a Di’Anno, lo bueno que tiene no vivir en Madrid es que estos conciertos se convierten en un auténtico acontecimiento.
Saxon acababan de llegar de su gira latinoamericana, y se nota que además de tener todas las tablas que se acumulan tras treinta años en la carretera, venían frescos y en forma. Ofrecieron dos horas de concierto en las que demostraron seguir a una gran altura. Peter Byford, demostró llevar con grandísima dignidad su sesenta cumpleaños y conservar sus capacidades vocales prácticamente intactas, de la banda que decir… no se me ocurre otro adjetivo que “impecable” durante todos los temas.
Este año publicaron el muy potente “Call to Arms” y se llevó unos cuantos temas del repertorio, pero claro está no dejaron atrás la herencia de su veintena de albumes de estudio. Con apoteosicos momentos cuando atacaron a sus temas más clásicos como Wheels of Steel o 747 Strangers in the Night.
Como os decía antes, no me considero gran fan de Saxon. Sigo sin serlo, así que creo que soy bastante objetivo al decir que se marcaron un señor concierto. En mi escala particular han subido unos cuantos escalones, da gusto ver a gente que tras tantos años repartiendo buena música saben compensar la falta de juventud con grandes dosis de experiencia y sientan cátedra con cada canción que tocan en directo.
Crónica por Oskar Sánchez, fotos por Oskar Sánchez.