Hace cosa de un año, enredando en Youtube, nos salió recomendado un vídeo de una banda que no conocíamos, los cuales molaba un huevo el rollo blusero que tenían, para sorpresa que…….¡Coño!, ¡si en esa banda estaban caras conocidas como Aitor e Indigo de Quaoar!.
Coincidencias de la vida, que después de un año de descubrirlos, ésta banda tenía planeado pisar tierras cántabras, exactamente en la Sala Niágara y contar con Soulbane como acompañantes de escenario. Qué bien pinta todo, ¿no?. Los bilbaínos sacaron en abril su tercer trabajo “Honest man blues” y recientemente hemos podido ver una chulada de videoclip del tema “Fear” (si podéis, echadle un ojuelo, mola mucho), single de dicho álbum. Los responsables de que éste disco haya llegado a nuestras manos, son James Room a la voz y guitarra, Indigo L. Agudo a la percusión, Aitor (Malamute) a las guitarras y coros, y Gabriel Brown al bajo. Como curiosidad, tanto Soulbane como James Room & Cía, tienen algunas cosas en común: una es que ambos han “parido” su último álbum éste año, y también, que el último videoclip de ambas bandas, además de ser temas con una intensidad brutal, las localizaciones son habitaciones de edificios deshabitados.
Estaba programado que a las 21:30 hrs. Se abriesen las puertas para acceder a la Niágara, y allí estaba en la taquilla, el road manager de James Room & Weird Antiqua, Gaizka Narváez, un tío muy majete, con el que dió gusto conversar (o darle la lija, habrá que preguntarle a él) mientras esperábamos que los músicos empezaran a hacer ruido. Una hora clavada de la apertura de las puertas, abrieron el concierto los de la tierruca, Soulbane, los cuales nos han dejado más que claro tanto en entrevistas radiofónicas, potentes directos, como reseñas musicales y redes sociales, que están su mejor momento. Me parece un puntazo con qué temas comienzan sus conciertos, ya que tanto “Worldwide soul” como “Cosmic Rhythm” incitan a mover el esqueleto, tanto con las piernas, como con palmadas (La parte instrumental de Juanma Pinto y Julio Salces, es más que imprescindible, ya que al igual que el café por las mañanas,se va haciendo poco a poco, proporcionando un olor que te encanta, y sabes que lo que va a venir segundos después, te va a poner a tope), además de hacer hincapié en los coros de Chus, que envuelven a la perfección la voz del vocalista. Como en otras ocasiones, a Iván Valle se le queda pequeño el escenario, por lo cual procede a recorrerse toda la sala mientras canta temas de “Psycho radio” y “The amazing acrobat blidman”. Es una gozada como ésta banda van ganando y fidelizando público, los cuales además de pasárselo genial, se animan a realizar coros con el cantante tanto con el mítico momentazo de “Rebel Yell”, como en último tema que han sacado “Song for a broken heart” o en “Ride On”, donde Mara Mena se plantó entre los zagales para corear como ella sabe el anteúltimo tema de su concierto. Personalmente, me gusta un montón cómo suena la voz de Mara con el conjunto, ojalá la gente les dé mucho la brasa para que cuenten con ella en más ocasiones. Y como se las saben todas, para terminar el concierto por lo alto, nos hicieron dar brincos y cantar el clásico “Inmigrant song” de los Zeppelin. Para los que tengan ganas de volver a verlos en vivo y en directo, el sábado 7 de diciembre estarán en el San Andrés Rock de La Franca (Asturias). Agradecer a Luis Ibáñez su dedicación para que todo sonase lo mejor posible y su simpatía en todo momento.
Y con el tiempo justo para echar un pitillo, se subieron al escenario “Los Room”, comenzando su concierto con los dos primeros temas de su último trabajo, “Storm are we” y “Fear”, siendo el último el más conocido por el videoclip que anteriormente he mencionado. Es una pasada disfrutar en directo, con qué buen gusto nos plantaron temas tanto bluseros, como “folkies”, jazz o country. Sí, ha habido de todo y para todos, imposible que ninguno de los temas no te flipase; además de la voz de James R., que si no fuese por la estética de los músicos, podría meternos en un concierto en el mismísimo Sam Crow Universe. En el público se oyó, que parecía una mezcla entre James Hetfield y White Buffalo. Entre tema y tema, un James muy comunicativo con el público, nos comentó que Indigo era su hermano, dejándonos estupefactos, ya que tanto por su aspecto, como por la forma de cantar, Room parece recién llegado de Irlanda. También me llamó la atención especialmente, “My baby´s gone” del primer disco “Weird Antiqua”, la cual tiene una melodía que dependiendo de cómo te pille de ánimo, puede derrumbarte, se te mete hasta las entrañas, además de una versión muy personal de “Chocolate Jesus” de Tom Waits.
Hubo un ambiente de gente que ya conocía a “Los Room”, los curiosos que lo descubrieron esa noche y los que iban dando por hecho que iba a ser un concierto de calidad, ya que conocían el talento y las tablas de los componentes de Quaoar en la banda. Decir que tanto los vídeos en la Bilborock como los de Radio 3, suenan mucho más descafeinados, no les hacen justicia para nada. En directo son muchísimo más intensos, de hecho (O eso, o se pasaron de vascos), Indigo estrelló un plato contra el suelo y a James, se le rompió una cuerda a medio concierto.
Para los que no pudieron asistir al concierto en Santander, el próximo 7 de diciembre estarán en la Sala Star de Tarazona de la Mancha. Además del público, ambas bandas conectaron muy bien, por lo que seguramente les veamos en alguna otra juntos, pero no revueltos.
Crónica de Álex Kennedy.
Fotos de Carmen Iglesias y Álex Kennedy.