Calentada. La última vez que THE OCEAN pasó por España la fecha del concierto en Bilbao era un Lunes y finalmente no me animé. Creo que no habían pasado 24h y ya me estaba arrepintiendo. En esta ocasión, la banda anuncia una pequeña gira llamada END OF AN EON, en la que anuncian que serán las últimas fechas de la actual formación, después de las cuales no sabemos quienes quedarán, pero suponemos que al menos ROBIN STAPS, el ancla de este proyecto colectivo, continuará adelante. Con esto sobre la mesa, decidí plantarme en Madrid un domingo y sacarme esta espina. Lo mismo al final por unas cosas o por otras la cosa se acaba aquí y ya no hay más oportunidades, para qué jugárnosla.
No sé si ha sido así en el resto de la gira pero para este concierto venían acompañándolos los noruegos SPURV, que están bajo el paraguas del sello PELAGIC RECORDS, fuertemente ligado a THE OCEAN. Se trata de un sexteto de post-metal instrumental, apenas pude escucharlos un poquito en las jornadas previas pero enseguida pude comprobar en directo como cumplían con todos los registros y recursos del género con soltura.
Empezaron a desfilar temas largos con desarrollos de intensidad creciente como mandan los cánones, quizás se pueda colocar a MONO como una influencia (esos arranques delicados con el xilófono me los trajeron a la mente) pero además con elementos que los hacen identificarse con un buena dosis de personalidad propia. A una sólida sección rítmica les siguen un tremendo trío de guitarras que no buscan seguirse en las mismas líneas y proponen colores diferentes en todo momento. La guinda del pastel la pone el sexto miembro con el trombón de varas, que lejos de ser un recurso aquí tiene un papel muy protagonista llevando los temas en un su punto más álgido de intensidad aún un peldaño o dos más arriba, el resultado: épico.
Después de esta sorpresa tan agradable, todos a recoger para dejar el escenario listo para el plato fuerte de la noche. Y digo todos porque ahí se puso a currar absolutamente todo el mundo, no es nada habitual ver a la banda principal ponerse a ayudar a recoger a la banda más pequeña, el reflejo de una banda nacida del underground que ha conseguido llegar al nivel más alto posible sin cambiar de status, donde puedan seguir estando cómodos controlando cómo hacer las cosas, aunque quizás eso pida una renovación cada cierto tiempo como parece que será ahora.
Empieza a sonar TAKE FIVE a modo de introducción, un tema que me encanta (el único vinilo de jazz que tengo), y ya estoy encendidísimo. El set se divide en dos partes, con una primera dedicada a su último álbum HOLOCENE, que tocan al completo excepto Unconformities (no contaban con KARIN PARK para la ocasión). Comienzo de forma arrolladora contrastado con momentos más reposados como la genial SEA OF REEDS en la que casi se podía notar un silencio sepulcral entre el público. La combinación de animaciones en la pantalla de fondo con los juegos de luces lograron una puesta en escena brutal, con el logo del álbum como elemento principal. Sobre el escenario tenemos ya a dos chicos a los vientos, uno de ellos el que vimos con SPURV anteriormente.
Llegados al final de esta primera parte, descanso de 15 minutos, con cronómetro en pantalla marcando la cuenta atrás para iniciar el segundo round con una selección de temas de los dos partes de PHANEROZOIC. Aquí el ambiente ya está muy caldeado, y si estás en las primeras filas has de andar con ojo porque a la mínima de cambio tienes a LOIC volando por encima de tu cabeza. No paró durante todo el concierto, lanzándose al público, escalando hasta la zona superior… muy contundente a las voces junto al resto de la banda rayando a un nivel altísimo.
Tras la clásica paradinha, vuelven con dos ases ganadores como TRIASSIC y JURASSIC|CRETACEOUS y ya termina de saltar todo por los aires. He perdido la noción del tiempo pero creo que han sido más de 2 horas de concierto y se me ha pasado en un suspiro. Estoy empapado, me duele el cuello y algún que otro golpe me he llevado. Pero he visto a la banda que más ganas tenia de ver en este momento, y ha sido un concierto para recordar siempre. Qué felicidad…
End of an Eon Tour 24/25
Sala Mon, Madrid
Borja Ponga