Vivimos en una tierra, en la que el talento musical es impresionante, muchas veces, por desgracia, eclipsados por las modas y tendencias de los medios oficiales, ya puedes llevar una trayectoria de más de 25 años a tus espaldas, que si no mueves tus caderas sensualmente, no llevas unos cuantos anillos en las manos o no formas parte de la parrilla de los 40 criminales y sus sucesores, lo tienes muy difícil y cada vez peor, agudizado por ciertos jueces cazatalentos escondidos detrás de gafas ahumadas, que ridiculizan o desprecian cualquier amago de salirse de lo establecido.
En su momento la todopoderosa MTV, sabía lo que era una guitarra eléctrica, con Beavis and Butt-Head poniendo el punto satírico. Muchos de nosotros, pudimos ver cierta luz por aquellos años, no hay más que ver y comparar las listas de éxitos de los comienzos y las de ahora. Con todo ese estado de Matrix en el que vive la mayoría, destacar haciendo otras cosas es muy complicado. Los que vivimos fuera de esa sociedad paralela, gracias ventanas como este medio, somos testigos de la gran calidad que tenemos en esta región, además de una manera muy transversal, dentro de los muy diferentes estilos que pueblan el rock y el metal. Dos claros ejemplos de ello son los dos protagonistas de este finde: The Shiny Souls y Vaquero; convocados por estos últimos para presentarnos su último trabajo. El lugar, no podía ser otro que la sala Black Bird de Santander, uno de los pocos reductos, donde podemos disfrutar cada semana de los mejores conciertos de nuestro rollo. Los primeros en ocupar el escenario serian THE SHINY SOULS. Nueva ocasión de poder ver en acción a nuestro rompehielos ruso favorito, el amigo Oleg. “Los Shiny”, como se conocen coloquialmente, banda emergente con base en Somo, creada en 2014, cuando 3 músicos cántabros se juntan con un ruso en un viaje sin retorno, revolucionando la escena de esta región de una manera fulgurante.
En la actualidad la banda la componen: Oleg Denisov (voz y guitarra); Jesús Argumosa (batería); Andrés Díaz (guitarra) y Asier Gómez (bajo). Tienen publicados: «Rocknrolla» LP (2015) autoeditado; «Spirit of Fire» EP (2016) de 8 temas y «Sin Lovers» (2019). Tercera vez que los veo y segunda este mismo año, tras su paso por la Sala Niágara donde presentaron su último disco en el pasado mes de marzo. Su veneno ha conquistado un montón de seguidores, con el colofón, de haber ganada el Renedo Rock este verano, con El Pirata de maestro de ceremonias. En este caso, serían el contrapunto perfecto a Vaquero. Comenzarían su concierto sobre las 21:10h, puntuales como suele ser la norma de la casa, arrancaríamos la moto con el tema que da título a su nuevo disco “Sin Lovers», un tema dedicado a los tan habituales heaters, esas personas que en el fondo critican porque sus vidas están vacías. Los guitarrazos son espectaculares, signo de identidad de su tremenda calidad. Es escuchar los primeros acordes y el cuerpo se pone en modo fiesta automáticamente con el hard rock 70s de altos quilates que practican. Tras el merecido aplauso, seguirían repasando su último larga duración, apareciendo en medio de una multitud con el tema “Alone in the crowd”, un tema con el que muchos nos sentimos identificados, saliendo de lo que hace todo el mundo, de las absurdas normas, que quieren que todos seamos sumisos e iguales, «(…) Solo en la multitud, feliz solo (…)», con un inicio suave con guitarras limpias, hasta que estalla en una explosión de guitarrazos, atrapándonos de inmediato como si fuera un tornado, siempre con la gran voz de Oleg al frente. Grandes solos de las guitarras engalanan el tema. Nos saludan y agradecen nuestra asistencia y la invitación de Vaquero para esa gran noche. Continuarían con uno de los grandes temas del disco “Hey, girl”, presentada por la inconfundible voz rota de Oleg, estalla en nuestras narices, con la fuerza de la batería de Jesús, atrapados por una noche loca de pasión. Proseguirían con un tema recuperado de su EP anterior «Sipirit of Fire», titulado “I Wanna Live After Die”, con un inicio lisérgico que te transporta a otra dimensión.
Tras agradecernos la asistencia, llegaría el turno de otro de mis temas preferidos del último disco titulado “Ride, surfer, ride”; que nos transporta a la orilla del mar, tumbados sobre la arena, vemos las olas moverse, con un rollo reggae y soul, al que se unen unos desarrollos de guitarra muy bonitos, junto a la voz de Oleg, que simula el movimiento de los olas, como si te mecieras entre el viento. Encararíamos la recta final de su concierto con el temazo “Inspiration”, grabado en el disco con una guitarra de 12 cuerdas, un viaje hasta la esencia de la inspiración, un viaje en el que la realidad y la ficción se confunden. La voz de Oleg suena con una fuerza tremenda en este tema. A continuación, interpretarían un tema dedicado a todas esas bandas que les han servido de inspiración dentro del soul, el blues, el rockabilly y le metal, “Dead Rocknrolla”, un gran tema que cierra el último disco, en el que las guitarras suenan como si disfrutaran, transmitiendo alegría y fiesta, provocando que todo el mundo moviese los pies. Aprovecharían para presentar a los miembros de la banda e invitarnos a su puesto de merchan para adquirir el disco o alguna camiseta. Concluyendo con un tema del primer disco titulado “Smile”, con un aire a lo Bob Dylan en la forma de cantar, que transmite mucho sentimiento, con unos tremendos guitarrazos, blues/soul, que me gustaron mucho. Bolazo en toda regla el que se marcaron The Shiny Souls, para mi uno de las mejores bandas emergentes que tenemos en la región. Una banda de esas que no basta con que te lo cuenten, tienes que verlos en directo para sentir de verdad la fuerza y la calidad que trasmiten. Si necesitas mover un escenario con pura energía, no lo dudes, este es tu grupo.
Tras el cambio de bártulos del escenario, llegarían los protagonistas de la noche VAQUERO, presentado su nuevo disco «La Grandeza de mis pequeñas Cosas» en Santander. A Paso de Vaquero, provenientes de Reinosa, llevan desde el año 2010, creando poesía en forma de canciones pop-rock, con influencias de Platero o La Fuga y algún toque de indie r3. Para su último disco han simplificado su nombre a VAQUERO. Tienen publicados dos discos anteriores: «Viaje a tu recuerdo» (2013) y «Piedras» (2017), además de una maqueta previa. En la actualidad la banda la componen: Juan Carlos Argüeso (voz y guitarra); Verónica Valdezate (bajo); Tito Crespo (batería) y Abel del Pozo (guitarra solista). El crecimiento de la banda ha sido tremendo, siendo una de las bandas que más conciertos programa de la región, con la gira de «Piedras» celebraron unos 64 conciertos. Su último trabajo, así como el anterior, se ha grabado en los “Estudios CLIP” de Nando G. Miguel (La Fuga) en Reinosa. Comenzarían sobre las 22H con el tema que abre su último disco “Demasiadas Expectativas”, tema en la que la voz Juan Carlos entra suavemente con una dulce armonía, con sensaciones agridulces en la temática de las letras, como ya es marca de la casa, en este caso poniéndose la venda antes de la herida cuando la pasión desaparece, huyendo de las ataduras. Tras saludarnos, sin apenas pausa, viajaríamos al pasado, a su primer disco, con el tema que le da nombre “Viaje a tu recuerdo”, las guitarras suenan muy bien dándole mucha vitalidad, un contrapunto que choca con la temática del tema, donde los recuerdos de algo que ya no existe, no te dejan avanzar. Vero haría una de sus primeras incursiones entre el público. Tras agradecernos la asistencia, darían un salto a su segundo disco con el tema “Mejor”, uno de los que más sobresalen de aquel larga duración, las guitarras suenan muy bien y da un chute de vitalidad, con algún guiño a su Reinosa. Sin abandonar este disco, llegaría el turno al tema que le da nombre “Piedras” , con una potente batería de inicio, un tema impregnado del sonido Vaquero 100%, que cada vez tiene más adeptos. Continuarían así con unas 19 canciones, demostrando que son pura vitalidad, haciendo que todos los allí presentes no paráramos de vibrar con sus historias y los guitarrazos. Aunque te estén contando la peor de las desgracias personales, siempre acabarás con una sonrisa en la boca. Su último larga duración, es un gran disco, que generó muchos momentos emotivos como sería el tema “El Chico de los recados”, que estuvo precedido de una merecido agradecimiento a Nando G. Miguel en la producción, prolongada con el tema “Princesa” de Sabina. Una de las joyas del último disco es “Estrellas varada”, con un punto extra de velocidad, gracias a la línea de bajo y batería, la cual recordaron ocupó Edu (La Fuga), en la presentación en el Teatro Principal de Reinosa. –Todo esto empezó en 2010, cuando encontré a estos tres locos que perdieron el norte-, nos comentó Juan Carlos, para dar paso al tema “Sin Norte”, con una letra que bien podría ser un himno a nuestra música, a lo que significan nuestras canciones y lo que nos evocan: «(…) Y cuando empiezo a cantar, Mi voz no deja de temblar. No tengo los pies en el suelo… Ojalá yo pueda ser; Lo que quieras escuchar; Cuando estás buscando consuelo… Voy a contracorriente (…) podría ser normal, pero eso no me divierte… (…)».
A continuación, llegaría un momento muy entrañable, cuando Juan Carlos, tomaría su bonita guitarra acústica blanca, para susurrarnos como “La Piel del Viento”. Intenso tema con grandes desarrollos de guitarra, que le dan al tema un punto muy bueno, acompañado por la voz melódica de Juan Carlos. Tras el merecido aplauso, nos pondrían de nuevo una sonrisa en la boca con el famoso tema indie “Voy en un coche” de Christina Rosenvinge. Retomaría su guitarra eléctrica con otro de los temazos de su último disco, con una carga reivindicativa tremenda, alzando el puño bien alto, luchando contra la lacra social del maltrato a la mujer, por desgracia, aún muy presente en nuestra sociedad, “Me Quiero Viva” . A continuación tendrían otro guiño a sus influencias, con el clásico “El Roce de Tu cuerpo” de Platero y Tú. Pedirían nuestra colaboración para que les acompañáramos con el siguiente tema “Salto al vacío”, que contó en el disco con Pedro (voz de La Fuga). La fiesta no cesaría con el tema “Malos Tragos”, con aires de rockabilly, que te hacía no parar de mover los pies, mientras la cerveza aclaraba nuestras gargantas. Sin salir de ese perfil bailongo, visitaríamos el disco anterior con “Bonnie & Clyde” prolongada con la mítica “Mueve tus caderas” de Burning. Continuarían con el disco anterior con el tema “Por Abrir Sus Alas”, que aprovecharía para presentar a la banda y agradecer la presencia a los técnicos entre ellos, nuestro mundial Jorge Catalán.
Otro de los temazos de su segundo disco sonaría a continuación “Superhéroe”, dedicado a todos esos héroes sin capa, con un estribillo muy pegadizo y emotivo, que no te sacas de la cabeza con grandes guitarrazos de Abel. Entraríamos en la recta final del concierto, pasando nuevamente por uno de sus influencias con el tema “Whisky barato” de Fito & Fitipaldis, que siempre nos trae buenos recuerdos. Retomarían el último disco con los temas “Tu mejor amigo”, single con vídeo que lanzan con unos paisajes muy bonitos y “Pequeño”, este último, para mí el mejor tema del disco y que estoy seguro que se convertirá en uno de sus himnos imprescindibles, publicado como single adelanto y que sería muy coreado por los allí presentes. Terminaría así una gran noche de música con mayúsculas. Por un lado Los Shiny, pura fuerza de rock setentero con acento ruso, una de las bandas más prometedoras que tenemos en la región y con uno de los mejores directos que te puedes encontrar; y por otro lado Vaquero, poco a poco van madurando el proyecto, un discazo que con una gran producción, que se merece estar entre los mejores de este año en la región. Un disco con canciones llenas de vitalidad, buenas composiciones y lo que es lo más importante, con un potente directo, al que os invitamos sin lugar a dudas, para poder sentir de verdad lo que es Vaquero. No me extraña que al cabo del año hagan tantos kilómetros.
Como comentaba al principio, estamos en una tierra pequeña, pero llena de grandes músicos, con una calidad enorme, que cada vez nos lo ponen más difícil para escoger lo mejor del año, como es el caso de nuestros dos protagonistas de la noche, pero gracias a ellos y a salas como el Black Bird que nos acercan cada fin de semana un trocito de nuestro infierno particular, haciéndonos las semanas mucho más llevaderas.
Crónica y fotos: John Man.